En medio de los temores relacionados con el coronavirus chino, la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) y el peso mexicano iniciaron 2020 con el pie derecho, al presentar alzas que superan a sus pares en el resto del mundo, gracias al optimismo sobre la ratificación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), entre otros hechos.
Considerada la quinta bolsa de valores más grande de América, la BMV culminó ayer en 45 mil 604 puntos y acumula una ganancia de 4.7% desde que inició 2020, de acuerdo con información de la agencia Reuters.
Se trata del centro bursátil que más ha subido este año en el continente, por encima de sus similares en Norteamérica y Latinoamérica, así como de los más favorecidos a escala mundial.
De las 35 empresas con más transacciones en la BMV, 30 presentan ganancias en 2020, destacando la empresa química Orbia, antes Mexichem, cuyas acciones han repuntado 18% en el año, seguida de Genomma Lab con 12.6% y Kimberly-Clark con 10%.
En cambio, la operadora de restaurantes Alsea arrastra una pérdida de 5.1% y FEMSA de -1.8%.
Después de permanecer en el fondo de la tabla entre los principales mercados accionarios por sus magros resultados en 2019, la BMV presenta mayor atractivo este año ante la expectativa de que el Banco de México (Banxico) continúe bajando su principal tasa de interés, lo que reduciría el premio por invertir en instrumentos de deuda del gobierno y haría más conveniente colocar capital en títulos de empresas.
Sólo detrás de la rupia indonesia, el peso mexicano también destaca por ser la segunda moneda con más ganancias frente al dólar en 2020, al sumar una apreciación de 1.3% en las negociaciones internacionales, donde se realiza la mayoría de operaciones con la moneda nacional, indican datos de Reuters.
En ventanillas de CitiBanamex, el dólar ha bajado 19 centavos en el año y se terminó vendiendo ayer en 18.97 pesos, el precio más bajo en los últimos 17 meses.
Para Ernesto O’Farrill, director general de Bursamétrica Casa de Bolsa, la bolsa mexicana y el peso se han visto favorecidos por el avance del T-MEC y porque los inversionistas confían en que la economía mundial mejore a medida que se detiene la guerra comercial entre Estados Unidos y China.
Desde su perspectiva, México todavía ofrece una tasa real en pesos muy alta con respecto a otras naciones, mientras que los bancos centrales de Estados Unidos, Europa, Japón y de más países con economías desarrolladas han comenzado a reducir sus tipos de interés, lo que contribuye a que más inversionistas se animen a traer capital financiero hacia los mercados emergentes como el mexicano.
“La bolsa mexicana está recuperándose del año pasado, todavía está por debajo de sus máximos históricos y las acciones de las empresas enlistadas presentan niveles de subvaluación importantes. Yo estimó que cerrará el año en 48 mil puntos”, consideró O’Farrill.
En su opinión, México enfrenta varios riesgos este año, como una eventual desaceleración de la economía de Estados Unidos hacia finales de 2020 o principios de 2021, o inclusive puede haber una ligera recesión en ese país.
Destacó también que las principales agencias calificadoras tienen en perspectiva negativa la nota soberana y la de Pemex, cuya degradación implicaría una depreciación del peso a 21 unidades por dólar para finales de año y limitaría las ganancias para la BMV.