La bolsa mexicana ganó el lunes en una jornada con escasos negocios, pero marcó su peor trimestre en más de 17 años impactada mayormente por dudas sobre el nuevo Gobierno además de preocupaciones sobre el crecimiento global y el comercio, mientras que el peso cerró el año estable.
El referencial índice bursátil S&P/BMV IPC subió en la última sesión del año un 0.44% a 41,640.27 puntos, con un reducido volumen de 67.7 millones de títulos negociados.
La plaza registró una caída acumulada de 15.89% en el último cuarto del 2018, su peor desplome para un periodo de tres meses desde septiembre de 2001, cuando Estados Unidos sufrió ataques terroristas con aviones tripulados.
El índice accionario líder mexicano también anotó una caída anual acumulada de 15.63 por ciento, la más pronunciada desde 2008, cuando fue de 24.23%.
Los mercados globales han estado deprimidos este año por las disputas comerciales del presidente estadounidense, Donald Trump, con China, la incertidumbre sobre la planeada salida de Gran Bretaña de la Unión Europea y, más recientemente, el cierre del Gobierno federal de Estados Unidos.
En cuanto a factores internos, lo que golpeó la confianza de inversionistas en los últimos tres meses del año fue la forma de tomar decisiones del nuevo Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, dijo James Salazar, economista de CI Banco.
AMLO, como se conoce al mandatario que asumió el 1 de diciembre, y su equipo económico han tenido desde octubre que salir a calmar a los mercados luego de que anunció la cancelación de la construcción de un nuevo aeropuerto para la Ciudad de México tras una consulta pública y por polémicas iniciativas de su partido en el Congreso.
"Esas decisiones no gustaron nada y el mal sentimiento se quedó entre los inversionistas", dijo Salazar.
El mercado bursátil se ha movido recientemente de manera "lateral" y así continuará hasta que se tenga más claro cómo López Obrador está manejando las finanzas públicas, dijo por su parte Jorge Plácido, analista en Vector Casa de Bolsa.
"Será importante escuchar las guías para 2019 que presenten las empresas que integran el principal índice de la bolsa en sus reportes del cuarto trimestre, para conocer su visión de la situación económica", añadió.
PESO CON POCOS CAMBIOS
Mientras tanto, el peso mostró pocos cambios en la última sesión del año, registrando en diciembre un repunte de casi 3.7 por ciento. Con ello cerró el año prácticamente sin cambios respecto al cierre del 2017.
La divisa local cotizaba en 19.6437 por dólar a las 15.27 (2127 GMT), con una ganancia marginal de 0.04 por ciento frente a los 19.651 del precio de referencia de Reuters del viernes.
La moneda mexicana llegó a depreciarse en el año hasta cerca de la barrera de los 21 por dólar debido en parte a preocupaciones en torno a la renegociación de un tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá.
En las últimas semanas el peso recuperó terreno por apuestas de que la Reserva Federal de Estados Unidos podría frenar en el 2019 el ritmo del incremento de sus tasas de interés, y la presentación por parte de López Obrador de un presupuesto para el Gobierno que fue bien recibido por los mercados.
Pero el peso podría enfrentar presiones al inicio de año.
"Se espera que la moneda inicie 2019 con un escenario de elevada incertidumbre externa, por el riesgo de una desaceleración económica en China y Estados Unidos", dijo Gabriela Siller, directora de análisis económico de Banco Base.
"De manera interna también existe incertidumbre, porque se desconoce si el nuevo Gobierno respetará la prudencia fiscal delineada en el Presupuesto de 2019, algo que será observado de cerca por el mercado y por las agencias calificadoras", agregó.