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El mercado bursátil en México hiló ayer su peor racha desde que hay datos comparables, ante la incertidumbre por la disputa comercial entre Estados Unidos y China, y en medio de dudas sobre la política interna y el consumo privado.
Datos de la agencia Bloomberg señalan que el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) concluyó en 43 mil 584 puntos, después de caer 1.2% el martes, siendo la undécima jornada consecutiva de pérdidas.
Se trata del lapso más prolongado a la baja desde que hay datos comparables, a partir de enero de 1978.
Sin embargo, el balance de la pérdida no ha sido tan severo como en rachas negativas de menor duración, porque hasta ayer el índice acumulaba una caída de 4.3% durante las 11 jornadas.
En cambio, a finales de febrero
y principios de marzo pasado, el IPyC sufrió 10 sesiones en rojo que le costaron 4.9%, mientras a inicios de 2016 acumuló una caída de 7.6% también en 10 jornadas.
La cadena de tiendas Walmart de México es la empresa más valiosa del país, tras reportar una capitalización de 949 mil millones de pesos, aunque perdió ayer 20 mil millones.
La segunda mayor es la firma de telecomunicaciones América Móvil, cuyo valor de mercado cayó a 896 mil millones de pesos, con pérdida de 79 mil millones de pesos en las últimas cinco jornadas.
En tanto, la Bolsa Institucional de Valores (BIVA), la segunda bolsa de valores del país, finalizó en 890 unidades luego de ceder 1.4% y ligó también 11 sesiones de pérdidas.
Las bolsas mexicanas reflejaron la caída de sus pares en Estados Unidos, cuyos índices accionarios reportaron ayer la pérdida más severa desde marzo pasado, porque el presidente Donald Trump amenazó con subir los aranceles a China.
Sin embargo, la mala racha que atraviesa el mercado mexicano también está relacionada con la incertidumbre por la política del gobierno y la situación económica nacional, particularmente del consumo privado y la producción de petróleo, entre otros riesgos para el crecimiento.
Los inversionistas reciben mayor premio por tener instrumentos de deuda del gobierno, porque Banxico subió las tasas al nivel más alto desde inicios de 2009, situación que restó atractivo a títulos de empresas.