La guerra entre Rusia y Ucrania tendrá un impacto directo en México, con mayores precios del petróleo y presiones en la gasolina, además de un escenario de menor crecimiento e inflación elevada, dijo Bank of America (BofA) Securities.
“Esto es principalmente un shock estanflacionario [menor crecimiento con alta inflación] para México. Vemos riesgos a la baja para nuestro crecimiento del PIB de 1.5%, que ya está por debajo del consenso para 2022”, mencionó.
En un análisis sobre el impacto en México del conflicto entre los países europeos, la firma aumentó su pronóstico de inflación general a 6% desde 5% para fines de 2022, y a 4.6% desde 4.4% para fines de 2023.
BofA explicó que los elevados precios del petróleo tienen un impacto negativo en la balanza comercial de México, al tratarse de un país importador neto.
“Cuando los precios del petróleo aumentan, Pemex y otros productores de petróleo en México se benefician de mayores ingresos por exportaciones, pero los consumidores y el gobierno gastan más en gasolina [el gobierno, a través del estímulo fiscal para contener el aumento de los precios de la gasolina en la bomba]”, destacó la firma.
“Por lo tanto, los precios más altos del petróleo son un shock comercial negativo para México y, por lo tanto, los ingresos caen”.
Además, el escenario de mayor inflación meterá más presión al Banco de México, por lo que Bank of America ahora espera que suba 300 puntos base en el resto del año para poner la tasa de referencia en niveles de 9% a fines de 2022.