Considerando los riesgos para la inflación, la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) decidió por unanimidad dejar la tasa de referencia sin cambio.
Así, el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día quedó en 4%, informó el banco central en el segundo anuncio de política monetaria del año.
Así, analistas financieros consideraron que finalizó el ciclo de bajas, poniendo una pausa ante la mayor inflación y volatilidad en los mercados.
Banxico dijo que hacia adelante, la conducción de la política monetaria dependerá de la evolución de los factores que inciden en la inflación, en sus trayectorias previstas en el horizonte de pronóstico y en sus expectativas.
Advirtió que en un entorno incierto, los riesgos para la inflación, la actividad económica y los mercados plantean retos importantes en la política monetaria
Destacó que las expectativas de la inflación general para el cierre de 2021 aumentaron y las de mediano y largo plazos se mantuvieron estables en niveles superiores a la meta de 3%.
Reconoció que las trayectorias esperadas de corto plazo para la inflación general y la subyacente son ligeramente mayores a las que previeron en el último Informe Trimestral. No obstante, confió en que llegará a la meta de 3% al segundo trimestre de 2022.
Aseguró que en los próximos meses la inflación resentirá transitoriamente los efectos aritméticos por la reducción en precios de los energéticos del año pasado.
Para analistas de Banorte, tras el fin del ciclo de bajas en la tasa de referencia, el próximo movimiento será un ajuste al alza.
Sin embargo, no se sabe en qué momento sucederá ante la dinámica de los mercados y su impacto en los energéticos y el tipo de cambio.
También dependerá de la trayectoria que podrían mostrar los precios tras la “joroba” que tendrá durante el segundo trimestre del año y el momento que la Reserva Federal de Estados Unidos iniciará la normalización de su política monetaria.