Los bancos centrales de Brasil y Chile mantuvieron sin cambios este miércoles sus tasas de interés, a un día de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) de su anuncio de política monetaria.
El Banco Central de Brasil mantuvo el miércoles sin cambios su tasa de interés en 10.5%, al optar por la "cautela" ante un escenario internacional "incierto" y proyecciones de una inflación en alza en el país.
El Comité de Política Monetaria tomó la decisión de manera unánime, debido al "escenario global incierto y el escenario interno marcado por una actividad resiliente, alza en proyecciones de inflación y expectativas no ancladas" que "exigen un seguimiento diligente y una cautela aún mayor", dijo el organismo en un comunicado.
A su vez, el Banco Central de Chile mantuvo su tasa de política monetaria (TPM) en el 5.75%, a consecuencia de una menor actividad económica local y luego de un año de reducciones.
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La decisión, adoptada por unanimidad en el Consejo del Banco Central (BC), mantiene la tasa por primera vez desde junio de 2023, cuando comenzó a reducirla desde un 11,25%. En julio de ese año el ente emisor aplicó un recorte de un punto porcentual, el mayor en 14 años.
El BC informó en un comunicado que "en el mercado financiero local, las tasas de interés reajustables de corto y largo plazo han disminuido", "la actividad ha evolucionado por debajo de lo proyectado" en junio y "la inflación de junio estuvo en línea con lo previsto".
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En el primer trimestre de 2024, el PIB chileno creció un 2.3% respecto a igual período de 2023. En junio, la inflación interanual se situó en el 4.2%, lejos del 12,8% de 2022, la mayor en tres décadas.
Para todo 2024, el Banco Central proyecta un crecimiento del PIB en un rango de 1.5% a 2.5% y que la inflación termine en 4.2%.
El Banco Central, tal como lo dijo en junio, consideró el miércoles que la TPM ya habría "acumulado durante el primer semestre el grueso de los recortes previstos para este año".
La tasa de política monetaria podría seguir reduciéndose "a un ritmo que tomará en cuenta la evolución del escenario macroeconómico y sus implicancias para la trayectoria de la inflación", dijo el BC.
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