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Los especuladores y los fondos de cobertura recortaron las apuestas a favor del peso mexicano durante la semana pasada, de acuerdo con los contratos negociados en la Bolsa Mercantil de Chicago.
Desde marzo de 2023 apuestan por una apreciación de la moneda nacional mediante la compra de pesos a una cotización determinada para esperar venderlos a un precio superior a futuro.
Sin embargo, al pasado 16 de abril, es decir, antes del ataque de Israel a Irán, las apuestas netas a favor del peso venían cayendo en Chicago, pues llegaron a 3 mil 733 millones de dólares, tras registrar 4 mil 263 millones una semana antes.
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Las posiciones que indican una apreciación de la divisa mexicana disminuyeron por primera vez en cuatro semanas, informaron los expertos de Banorte. La más reciente encuesta sobre el mercado cambiario que realiza cada tres años el Banco de Pagos Internacionales reveló que 82% de las operaciones con pesos mexicanos se llevan a cabo en el extranjero.
La directora de Análisis Económico, Cambiario y Bursátil de Monex, Janneth Quiroz, dijo que las posiciones especulativas netas llevan 58 semanas seguidas a favor del peso, aunque en la última cayeron tras ligar varios aumentos y alcanzar el mayor nivel desde marzo de 2020.
En la semana del 10 al 16 de abril, inversionistas y operadores del mercado descontaron la posibilidad de que la Reserva Federal de Estados Unidos mantenga su principal tasa de interés sin cambio por más tiempo y que empiece a recortarla hasta septiembre próximo, en lugar de junio, como se preveía.
La experta de Monex agregó que los mercados esperan que la reserva realice sólo una o dos bajas este año, en lugar de tres, debido a los datos publicados recientemente en la Unión Americana que pueden generar presiones en la inflación.
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Quiroz indicó que dadas las tensiones geopolíticas en Medio Oriente, el superpeso sufrió la peor semana desde principios de octubre pasado al caer 2.6% y terminar el viernes en 17.09 unidades por dólar.
En Banorte indicaron que la operación de la moneda mexicana fue muy volátil, al oscilar en la semana entre 16.54 y 18.21. Estos rangos no se veían en cuatro años, concretamente desde marzo de 2020, cuando empezó la pandemia.
El peso fue la divisa más sensible a la coyuntura geopolítica, al depreciarse en el intradía del jueves hasta 7.0% a 18.21, su mayor caída en cuatro años, aunque logró el viernes reducir el movimiento. Desde su perspectiva, el tipo de cambio va a fluctuar esta semana entre 16.80 y 17.50.
Tras la respuesta de Israel al ataque con misiles y drones de Irán, el dólar se fortaleció ante las principales divisas, mientras que el oro se acercó a un nivel récord.
Además, la preocupación por una inflación más alta se reavivó por el repunte en el precio del petróleo, con el barril de crudo del Mar del Norte, Brent, por arriba de 90 dólares, lo cual limitaría el margen de maniobra de los bancos centrales.
