El fabricante automovilístico alemán Audi anunció el martes que contempla cerrar su fábrica de coches eléctricos de Bruselas debido a una "caída mundial" de la demanda de estos vehículos de alta gama.
La empresa filial de Volkswagen, indicó que planea "el cese anticipado de la producción" de sus modelos SUV Q8 e-tron en la fábrica que emplea a tres mil trabajadores.
La dirección está discutiendo "soluciones para la fábrica" de Bruselas, lo que "podría igualmente incluir un cese de sus actividades si no se encuentra ninguna alternativa", añadió el fabricante en un comunicado.
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Audi alegó una "caída global de los pedidos de los clientes en el sector de los coches eléctricos de lujo" para justificar esta decisión.
Después de haber realizado masivas inversiones en los vehículos eléctricos en los últimos años, los fabricantes de automóviles se vieron afectados por la ralentización de la demanda en este sector.
Volkswagen (cuyas 10 marcas comprenden igualmente Porsche, Seat y Skoda) declaró que el cierre de la fábrica de Bruselas, o la búsqueda de otras opciones en su lugar así como otros gastos imprevistos tendrían un impacto de dos mil 600 millones de euros, alrededor de dos mil 800 millones de dólares, en el ejercicio 2020.
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Audi habló igualmente de "desafíos estructurales de larga data" en la fábrica de Bruselas, como una disposición de la fábrica difícil de cambiar y costes de logística elevados.
La empresa indicó que se realizará una consulta sobre las próximas etapas.
Por su parte, los representantes del personal de Audi "piden perspectivas a largo plazo par la fábrica y nuestros colegas en Bruselas", declaró Rita Beck, portavoz del comité Audi dentro del comité de la empresa europea del grupo Volkswagen.
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