Los principales bancos del país tienen como apuesta principal para este año que disminuya el uso de efectivo en el pago del transporte público y se utilice directamente el teléfono móvil o tarjetas bancarias.

Según Santander, se han registrado cerca de medio millón de recargas con tarjetas inteligentes y la plataforma de Cobro Digital (CoDi) del Banco de México desde que se instalaron, en octubre pasado, máquinas para pago en algunas estaciones del Metrobús y el Metro de la Ciudad de México.

El fin es tener para los próximos dos años un promedio de 5 millones de recargas por mes, a través del Metrobús y otras modalidades de transporte en la capital del país y en otras ciudades.

En términos generales, la adopción de la tecnología de pagos sin contacto avanza de forma gradual en el sistema financiero mexicano, con apenas 2% del total de transacciones realizadas bajo esta modalidad; sin embargo, la pandemia de Covid-19 ha acelerado la adopción de esta tendencia global.

“Va a ser un disruptor de la cultura para poder pagar sin contacto, ya sea con el teléfono o la tarjeta, porque realmente le facilita la vida a la gente. No van a tener que hacer una fila en una caja y comprar plásticos recargados o comprar sus boletos del Metro o Metrobús, sino que directamente van a llegar al torniquete y pagar con su teléfono o tarjeta”, dijo el director ejecutivo de Medios de Pago en Santander México, Matías Núñez.

La expectativa es avanzar en la adopción de medios de pago digitales en todas las actividades económicas del país, y el principal reto es convencer a los comercios de la facilidad y otros beneficios de estas alternativas.

“Hay que explicarle al tendero, a la persona que está atendiendo al cliente, que es más fácil poner el importe y la terminal punto de venta para poner el plástico sin tener que manipularlo y poner el PIN. A lo largo del tiempo y con la experiencia en otros países. Por ejemplo, en Polonia, 80% de los pagos con tarjetas físicas se hacen sin contacto en los comercios”, explicó el directivo.

No solamente la capital del país ha girado hacia los pagos digitales en servicios. Recientemente, el gobierno de Tlaxcala, a través de su Secretaría de Finanzas y HSBC, incorporó el uso de CoDi como medio para recibir pagos de diferentes impuestos, derechos, productos, aprovechamientos y realizar otras transacciones que en su mayoría suelen hacerse en efectivo y en ventanillas bancarias.

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