El gobierno federal y las autoridades del Reino Unido exploran escenarios de negociación para conservar los beneficios comerciales que se tienen actualmente, con el fin de evitar vacíos y la pérdida de preferencias de intercambio por el Brexit.
Si bien el Reino Unido deja de ser parte de la Unión Europea desde este 31 de enero, se mantendrán vigentes por casi un año los beneficios del Tratado de Libre Comercio Unión Europea-México (TLCUEM).
La Secretaría de Economía comunicó: “México y Reino Unido se beneficiarán del mismo trato preferencial del que gozan los estados de la Unión Europea, por lo que los operadores económicos podrán continuar beneficiándose de las preferencias arancelarias del TLCUEM”.
Por lo que exploran con las autoridades del Reino Unido, “los posibles escenarios de negociación con el fin de evitar un vacío entre la entrada en vigor de un nuevo tratado y la culminación del periodo de transición previsto en el Acuerdo de Retirada”, explicó la dependencia.
El director de Consultoría Estratégica & Outsourcing, Carlos Palencia, manifestó que la salida del Reino Unido del bloque europeo no tiene afectaciones para México por el bajo volumen comercial que se tiene con los países británicos.
“Las exportaciones mexicanas al Reino Unido son menos de 1.2% del total, pero se habrá de replantear tanto la regulación como el acceso preferencial a los mercados”, dijo.
De acuerdo con cifras de la Secretaría de Economía, el comercio de ambas partes sumó 4 mil 633 millones de dólares en 2018. Del total, 2 mil 213 millones fueron exportaciones de México hacia el Reino Unido.
Los principales productos de exportación fueron oro en bruto, semilabrado o en polvo, con casi 32% del total; partes y accesorios de vehículos, con 6.6%; cerveza, con 4.4%; computadoras, con 4%, y aparatos de telefonía, con 3.9%.
Además de que los mecanismos de promoción y seguridad recíproca de las inversiones extranjeras directas también deberán revisarse.
Por ello, “deberá renegociarse por separado un tratado de libre comercio con el Reino Unido, en paralelo al que se renueva con la Unión Europea, incluso por temas como reglas de origen, aranceles, propiedad intelectual, cooperación empresarial, servicio financieros y protección de inversiones”, añadió.