El entorno económico actual y las presiones en la cotización de maíz y el trigo provocarán que la tortilla tenga un incremento de un peso en su precio, afirmó el presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec), Cuauhtémoc Rivera.
El aumento afectará el poder adquisitivo de las familias, sobre todo si se considera que la autoridad dice que el aumento de precios es bajo, pero en realidad ya es de casi 10%, dijo.
En tortillerías y autoservicios de la Ciudad de México y zona conurbada el kilo se vendió en un rango de 10.60 a 16 pesos del 4 al 10 de noviembre, de acuerdo con datos de la Profeco.
En tiendas de autoservicio el alimento se vendió en niveles bajos, de entre 10.10 y 12.70 pesos por kilo, mientras que en las tortillerías va de 13 a 16 pesos.
La semana pasada el presidente del Sistema Producto Maíz, Vicente Álvarez Delgado, dijo a EL UNIVERSAL que se espera una baja cosecha del grano, lo que causa que el kilo de maíz esté en más de 5 pesos, arriba de los 4.50 pesos de enero.
“Avizoro que por enero o febrero estaremos arriba de 6 pesos por kilo de maíz, y va a aumentar el precio de la tortilla”.
Además, el presidente de la Confederación Nacional de Productores Agrícolas de Maíz, Juan Pablo Rojas, afirmó que temen que el entorno actual de baja producción, aumento de combustibles, falta de apoyos al campo, entre otras cosas lleven a productores de la masa y la tortilla a anunciar un aumento.
Inflación real
El presidente de la Anpec también destacó que los precios de productos de la canasta básica registran aumentos reales que rebasan la cifra de inflación oficial, de 4.09% en octubre.
“En noviembre se afianza la inflación y la carestía de la vida. Las causas: pandemia, pérdida de empleo, ultra demanda, factor estacional, inseguridad carretera y urbana, elevación del costo de la energía... Este menú de adversidades explica la caída de la economía familiar”, dijo.
Además, consideró que la población lleva ocho meses sobreviviendo a la pandemia.