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Ante las tendencias que muestran hasta el momento las encuestas, es altamente probable que Andrés Manuel López Obrador gane la elección del 1 de julio próximo, dijo Shelly Shetty, directora senior y jefe del grupo de soberanos de América Latina de Fitch Ratings.
“Vemos las encuestas que muestran que López Obrador tiene una verdadera posibilidad de ganar el 1 de julio”, dijo la directiva.
En el foro TLCAN y Elecciones: Visión en Tiempos de Incertidumbre, Shetty dijo que hay incertidumbre por las políticas que pudiera implementar su gobierno; sin embargo, la calificadora esperará a conocer las primeras decisiones de su gobierno para evaluar el posible impacto.
Explicó que en América Latina los candidatos nacionalistas tienen un discurso más radical durante el periodo de campañas, pero son más pragmáticos al tomar el gobierno.
“Hay cosas positivas en México. Un banco central autónomo, que podría controlar la desviación del marco de política fiscal actual”, comentó.
Para Fitch Ratings, la conformación del gabinete, el diseño del presupuesto, la designación del director general de Pemex, entre otras acciones de entrada de un posible gobierno de López Obrador, serán las primeras señales del camino que tomará su administración, dijo la analista.
Destacó que Andrés Manuel López Obrador ha sabido capitalizar el descontento en el país por la corrupción y el clima de inseguridad.
Fitch Ratings dijo que actualmente los principales riesgos para la calificación crediticia de México son un mal término de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, complicaciones en las condiciones macroeconómicas y que se detenga la implementación de las reformas aprobadas en la actual administración.
En específico, un cambio en la apertura del sector energético provocaría una revisión de la nota crediticia del país, que actualmente se ubica en BBB+, la segunda más alta de América Latina, por debajo de Chile.
Hasta el momento, la agencia mantiene su perspectiva de que las renegociaciones del TLCAN concluirán en un acuerdo positivo para los tres países; de lo contrario, un rompimiento llevaría a que en la región entren en marcha las reglas de la Organización Mundial de Comercio (OMC), con aranceles promedio de 2% que no afectarían el flujo comercial entre México y Estados Unidos.
Confianza en acuerdo. Para el presidente del consejo de administración de BBVA Bancomer, Luis Robles Miaja, la integración de América del Norte es imparable, aun cuando se acabara el acuerdo.
“Dicha integración ya es imparable, a pesar de los políticos, por las cadenas económicas que se han creado entre México, Estados Unidos y Canadá. Somos la región más productiva del mundo”, dijo.