La debilidad de la demanda de vehículos en varios países obligó a la industria automotriz a ajustar sus previsiones de producción y exportación hacia la baja.
La Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) informó que para el cierre de año se estima una caída de 4% en producción de vehículos respecto al año anterior, mientras que las exportaciones tendrán una reducción de 2.7%.
En total se fabricarán 3 millones 757 mil unidades y se exportarán 3 millones 357 mil autos este año.
En noviembre, la industria sumó siete meses de caída en producción automotriz y cuatro meses de contracción en exportación.
“Vemos difícil alcanzar las cifras de predicciones”, dijo Eduardo Solís, presidente de AMIA.
Sin embargo, Ford redujo considerablemente la producción de los modelos Fusion y Lincoln MKZ en la planta de Hermosillo, además dejó de fabricar el modelo Fiesta en Cuautitlán, Estado de México.
Volkswagen y Nissan, dos de los principales fabricantes, también ajustaron sus niveles de producción. La primera resintió la salida del Beetle, pues en noviembre no se fabricó este modelo, mientras que la producción de Jetta bajó de 10 mil 645 unidades en noviembre de 2018 a 3 mil 286 en noviembre de 2019.
Nissan redujo 34% la fabricación de Sentra y ya no produce el Note.
México exporta 80% de sus vehículos hacia Estados Unidos, mismos que en noviembre tuvieron una caída de 0.4%, aunque en el acumulado del año aumentaron 4.8%.
Derivado de la contracción en las exportaciones automotrices, la balanza comercial del sector cerrará entre 85 mil millones y 89 mil millones de dólares.
Como consecuencia de la caída en la comercialización de vehículos en el mercado interno, la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) informó que se han despedido entre 2 mil y 3 mil personas del área de ventas.