Derivado de la pandemia y la escasez de semiconductores, la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz ( AMIA ) estima una caída de 2.3% en la producción de vehículos en el país en 2021.
Mientras que las exportaciones crecerán apenas un 0.5% para el cierre de año.
En un comunicado, AMIA agregó que la industria automotriz alcanzará los niveles pre-pandemia, tanto de producción como de exportación, hasta 2024 .
“2020 marcó la peor crisis que jamás haya afectado a la industria automotriz y este 2021 continuó siendo un año retador.
“Desde la AMIA se presentaron pronósticos favorables para una recuperación segura para final de año; sin embargo, los retrasos tanto de vacunación, así como la escasez de los semiconductores afectaron dicho escenario”, indicó AMIA.
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A unos días del cierre de año, los volúmenes de producción y de exportación serán similares a los de 2020.
AMIA indicó que persisten retos como una inflación continua en toda América Latina, lo que ha agudizado la crisis económica en nuestro país.
Y si bien, este año se conmemoró el primer aniversario de la entrada en vigor del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), agregó AMIA, también se han presentado diferencias en cuanto al apartado de las reglas de origen.
“Los miembros de AMIA han realizado lo necesario para ajustarse a las reglas plasmadas en el tratado, siendo fundamental tener claridad a fin de lograr que se respete lo establecido en el texto del tratado y de las reglamentaciones uniformes”, apuntó la asociación.
Otro de los retos, son las recientes acciones para regularizar los vehículos ilegales o autos chocolate .
“Esto genera una afección en primer término al patrimonio de los ciudadanos propietarios de vehículos en el país, quienes cumplen con sus obligaciones fiscales, ya que reduce el valor ante la saturación de vehículos que se encuentran ilegalmente en el país”, indicó AMIA.
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La regularización de los autos chocolate beneficia a las organizaciones criminales, incrementa la “basura vehicular” que se encuentra en el país y afecta los avances para la reducción de autos contaminantes y seguros.
Además, la iniciativa de reforma a la Ley de Industria Eléctrica (LIE) también representa un gran reto para la industria automotriz.
“México se ha caracterizado por ser un país competitivo y atractivo para la inversión extranjera directa, siendo uno de los motores para el crecimiento y desarrollo del país a través de la generación de divisas de la economía mexicana.
“La iniciativa de reforma podría afectar dicho estatus del país, ya que, debido a estos compromisos internacionales y metas globales, la inversión futura se está viendo amenazada si el país no demuestra su compromiso con energías limpias y reducción de emisiones”, dijo José Zozaya, presidente de AMIA.
En cuestiones de electromovilidad, las automotrices han evolucionado a la adaptación de tecnologías verdes.
México ha firmado diferentes acuerdos para combatir el cambio climático; sin embargo, la falta de infraestructura en inversión en la materia dificulta y retrasa el cumplimiento de los acuerdos firmados.
Por lo tanto, es importante que tanto el gobierno como la iniciativa privada puedan entablar un diálogo constructivo para continuar con el cumplimiento de estándares internacionales sin descuidar las necesidades esenciales de la industria.
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