Entre 2019 y 2020, los países de América Latina, perdieron alrededor del 11% de los ingresos tributarios por la crisis de Covid-19 , señaló la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos ( OCDE ).
Lo anterior en un contexto en donde la evasión y fraude fiscal ronda entre el 5% y 6% del producto interno bruto (PIB) de la región, apuntó.
“Hay que poner en contexto, el telón de fondo de la crisis, porque casi el 11% de los ingresos tributarios, se perdieron entre 2019 y 2020”, dijo el jefe de relaciones globales y desarrollo del Centro de Política y Administración Tributaria de la OCDE, Ben Dickinson.
Durante el lanzamiento del informe de Transparencia Fiscal en América Latina , comentó que las administraciones fiscales y ministerios de Hacienda, hicieron todo lo posible por apoyar a las empresas con estímulos para enfrentar los costos de la crisis derivada de la pandemia.
Pero debe persistir en la agenda el combate a la evasión y elusión de impuestos, debido a que se pierden muchos recursos por esa vía en momentos de muchas necesidades por la emergencia sanitaria.
La jefa de la secretaría del Foro Global sobre Transparencia e Intercambio de Información con fines Tributarios de la OCDE, Zayda Manatta, puso de manifiesto que los flujos financieros ilícitos son una preocupación muy importante para todos los gobernantes del mundo.
Explicó que este problema significa una pérdida muy grande de recursos para los países, y tiene un impacto en la movilización de recursos y en la agenda de desarrollo en el plano internacional.
De ahí que hizo un llamado a aprovechar el uso efectivo del intercambio de información para combatir la evasión fiscal y la corrupción.
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