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Petróleos Mexicanos (Pemex) aseguró que a pesar de las medidas implementadas durante los últimos dos años para mejorar la situación financiera de la empresa, la firma calificadora Fitch Ratings modificó la perspectiva crediticia de estable a negativa.
Minutos después del anuncio de la agencia internacional —de la incertidumbre sobre los cambios potenciales en la estrategia que aplicará Petróleos Mexicanos a futuro, así como el deterioro en las métricas de crédito después de los impuestos— se afectaron las proyecciones de la empresa.
Señaló que no fue suficiente la estrategia anunciada por Pemex en septiembre sobre la disminución del ritmo de endeudamiento y la mejora en el balance financiero, que pasó de un déficit de 147 mil millones de pesos en 2015 a uno de 49 mil millones al cierre de 2018.
Las calificaciones de Fitch Ratings se basan en la fuerte relación de Pemex con el gobierno federal y el apoyo implícito de éste como resultado de la importancia estratégica de la empresa para la seguridad energética de México, dado que el país depende principalmente de Pemex para el suministro de gasolinas y diesel, detalla la petrolera.
Indicó que Fitch reconoce que la empresa es uno de los contribuyentes más importantes para México y destaca su estructura competitiva de costos antes de impuestos.
Pemex refrendó su compromiso de fortalecer sus indicadores operativos y financieros para superar su trayectoria de balance financiero, en línea con su plan de negocios.