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Alrededor de 460 mil empleos directos se perderán en el país si se prohíbe el esquema de outsourcing (subcontratación), mientras que 2 millones 760 mil más migrarían a esquemas sin seguridad social, mostró un análisis que realizó ManpowerGroup.
De aprobarse la iniciativa del Ejecutivo que considera eliminar esa práctica, sólo un millón 380 mil plazas podrían ser absorbidas como empleados de base por empresas de tercerización.
“El empleo tenderá a acoplarse al mercado laboral actual, en donde el sector informal es el que absorbe a la mayoría de los trabajadores que quedarían eventualmente fuera de los esquemas de subcontratación”, explicó Héctor Márquez, director de Relaciones Institucionales de ManpowerGroup.
La informalidad laboral es uno de los principales retos que históricamente ha enfrentado México y que, por las condiciones de la emergencia sanitaria, más la incertidumbre en torno a la propuesta de modificaciones de la Ley Federal del Trabajo, podrían adelgazar los índices y tendencias de creación de empleo formal.
Considerando los 4 millones 600 mil empleos por outsourcing que existen en el país, de acuerdo con los datos del Inegi, y que según las intenciones de contratación de las empresas sólo 30% de los trabajadores subcontratados pasarían a ser de base, 60% pasarían a esquemas sin seguridad social y 10% se perderían o pasarían a esquemas informales.
Con ello existirían alrededor de 3 millones 220 mil personas que perderían oportunidades laborales o se emplearían sin los derechos laborales que marca la Ley Federal del Trabajo.
Estos más de 3 millones de personas engrosarían la informalidad existente en México, donde se reportan más de 30 millones de empleados informales, y a la par afectaría negativamente a la formalidad actual de 23 millones de trabajadores, de acuerdo con el Inegi.
“Por ejemplo, el sector de transformación y muchas empresas grandes podrían tener más trabajadores de planta, pero en el campo se presentaría lo contrario y se verían más afectadas sus condiciones, al igual que en micro y pequeñas empresas”.
Se debe analizar que en el país hay apenas alrededor de un millón de empleadores que sí realizan contrataciones con seguridad social, tomando en cuenta que el Inegi reporta 2.5 millones de empleadores, lo que significa que una gran mayoría opera en
la informalidad.
El mes pasado el IMSS reportó un total de un millón 414 empleadores registrados, de los cuales 95% son empresas micro y pequeñas, mientras que 5% son medianas y grandes.
