Llevar agua potable a la Zona Metropolitana de Monterrey (ZMM), Nuevo León, va a tener un costo total de 38 mil 219.8 millones de pesos, pero será insuficiente para resolver el problema de escasez en 16 municipios de la zona y ocho foráneos que se abastecen de las mismas fuentes donde habitan más de 5 millones de personas.

Así lo indican cálculos de la consultora Inver Planning, contratada para elaborar el análisis costo-beneficio del proyecto, entregados al gobierno federal, estatal y a la el mes pasado.

“Aun con la construcción del acueducto Cuchillo II para el abastecimiento de agua potable en bloque a la ZMM, es previsible que se generen condiciones de escasez de agua potable en un millón 532 mil 845 viviendas de esta localidad”, reveló la empresa en un documento obtenido por EL UNIVERSAL.

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De acuerdo con el informe, al incorporar “la oferta incremental aportada por la mayor capacidad de conducción de agua de la presa El Cuchillo, una vez ejecutado el proyecto”, anunciado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, el problema de escasez no se resuelve para los municipios afectados.

Esta situación impone una presión importante a las autoridades del Servicio de Agua y Drenaje de Monterrey (SADM) y de Nuevo León, “para identificar fuentes de abasto complementarias, que contribuyan a lograr un abasto sostenible, suficiente y eficiente, para satisfacer la demanda de la población”.

Incluso, advierte que, “en caso de que se mantengan las mismas fuentes de abastecimiento con que cuenta a la fecha el SADM, para el abastecimiento de agua potable a los 16 municipios del Área Conurbada de la Zona Metropolitana de Monterrey (AC-ZMM) y los ocho municipios foráneos que comparten las mismas fuentes es previsible que en el corto plazo sea necesario aplicar restricciones a los usuarios, ya sea a través de tandeos o de tarifas, debido a que la oferta sustentable será insuficiente para satisfacer la cantidad de agua que se demandará en los próximos años”.

Las proyecciones de la demanda total efectiva de agua potable a nivel domiciliario para la totalidad de usuarios refieren que pasará de 361 millones 183 mil 903 metros cúbicos anuales (m3) en 2022 a 411 millones 955 mil 790 m3 en 2023, 14% más y va a presionar al sistema para cubrir el consumo.

El problema es evidente, añade, ya que considerando que a partir de marzo pasado “el SADM ha tenido que comenzar a aplicar tandeos a la población, lo cual no había ocurrido en décadas” recomienda “limitar los aprovechamientos de las fuentes disponibles al máximo establecido por la oferta firme sustentable, a fin de evitar potenciales problemas de disponibilidad en el corto, mediano y largo plazos, que agravarían la escasez de agua en la zona de estudio”.

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