A la actual administración se le está acabando cada vez más el espacio fiscal en las finanzas públicas, debido al aumento de los gastos ineludibles que debe cumplir el gobierno federal cada año, advirtió el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
En un nuevo análisis que dio a conocer este lunes, estima que el espacio fiscal para 2024 será de 0.9% del producto interno bruto (PIB), frente al 2.8% que representaba en el 2018.
Lo anterior es importante porque significa que se están limitando los recursos disponibles para realizar política pública que atienda las necesidades de la población, matizó.
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Esto debido a que el incremento del gasto público, en conjunto con ingresos estables, ha resultado en mayores niveles de endeudamiento.
Además, sumando los altos costos financieros de la deuda, se convierte en un "posible círculo vicioso" que impacta negativamente a la sostenibilidad fiscal, alertó.
Hizo ver que mientras que en 2018 los gastos ineludibles como pensiones y el costo financiero de la deuda significaban el 18.1% del PIB, se está previendo que subirán a 20.5% en el paquete económico del 2024.
El miércoles pasado, el titular de la secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Rogelio Ramírez de la O, dijo a diputados durante su comparecencia con motivo de la glosa del Quinto Informe de Gobierno y para explicar el paquete económico que el presupuesto tiene poco margen de maniobra.
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Precisó que ocho de cada 10 pesos del gasto neto total, corresponden a compromisos obligatorios; de los más importantes, mencionó el costo financiero de la deuda, las pensiones y jubilaciones, las participaciones a estados y municipios y el presupuesto para los ramos autónomos.
En ese contexto, el CIEP ponderó la necesidad de una reforma fiscal para contar con mayores ingresos que puedan sostener el elevado gasto.
Destacó que las proyecciones presentadas como parte de los Criterios Generales de Política Económica 2024, se espera que los ingresos disminuyan a 20.8% del PIB a partir de 2027.
A la par, se estima que disminuya el costo financiero de la deuda y el gasto no comprometido, refirió.
"Esto implica que, en caso de presentarse presiones financieras al costo financiero u otro gasto ineludible, sin nuevas fuentes de financiamiento, el espacio fiscal se reduciría más", sentenció.
Frente a posibles impactos macroeconómicos como el precio del petróleo, altas tasas de interés, desaceleraciones económicas, entre otros, para el CIEP, se torna riesgosa la sostenibilidad fiscal.
De ahí que insistió en que una reforma tributaria que garantice la progresividad, sostenibilidad y eficiencia de la recaudación pública, es cada vez más necesaria.
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