En Palacio Nacional aseguran que todo está calculado, por lo menos en el aspecto de control político.
Vendrán definiciones: el posible gabinete, los mensajes a los inversionistas y la inevitable operación cicatriz.
Se fortalecen las sospechas sobre la alianza entre el grupo político y empresarial de Samuel García y el de AMLO
Sheinbaum sabe que sin margen de maniobra en el presupuesto, su eventual gobierno puede hacer crisis.
Hace unas semanas Sheinbaum envió a Mario Delgado a contactar a la toda-vía priista; le pidió concertar una cita