Según el Humanismo Mexicano, la clase alta no tiene re-medio. Ni modo: “Ya se echaron a perder por la ambición al dinero, por la ambición al poder y eso los ofusca, eso los enajena”.

Como ahora, en 1934 se argumentó que la educación incluye saber cómo funcionan los cuerpos. A diferencia de entonces, ahora la educación sexual tiene rango constitucional e incluye la perspectiva de género.