La reelección de Rosario Piedra provocó una fractura temporal de la bancada de Morena, que se dividió en “Claudistas” y “Amlistas”, además de que se hizo quedar a la presidentA como si fuera una marioneta.

No bastó el gobierno de López Obrador ni lo que va de esta administración para despabilar a ese pueblo, embelesado por el canto de las sirenas de los beneficios de los programas sociales

Varias veces hemos dicho que todo esto no parece que se trata de justicia, sino de venganza, pero hasta para eso se necesita inteligencia

Me dio mucho gusto el merecido reconocimiento que recibió el miércoles por sus primeros 55 años al frente de Los Universales

En el Palacio de la Zarzuela debieron aplicar la conseja de “A palabras necias, oídos sordos”, tratando de encontrar una explicación razonable al embrollo de pedir que se disculpe un país por hechos ocurridos hace más de 500 años. Quitar estatuas alusivas, poco aporta.