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A principios de la década de los noventa, Dodge nos presentó un auto que dejaría huella en la industria automotriz como un auto deportivo para algunos y para otros como un Muscle Car.
Lo creas o no, en el diseño del Dodge/SRT Viper participó Carrol Shelby creador del Shelby Cobra y Mustang Cobra . Al pensar en un nombre para el vehículo de Dodge , Carroll quería poner su sello personal con un nombre que asociara reptiles pero ya había modelos que incorporaban la palabra “Cobra” así que al texano se le ocurrió “Viper” (víbora).
Lo que Dodge quería era demostrar que eran capaces de construir un auto que pudiera hacerle frente a un Chevrolet Corvette, Jaguar XJS, Porsche 968 o Ferrari 348 que en ese momento estaban en su auge.
El primer Dodge Viper fue develado en el Salón de Detroit de 1992 presentando debajo del cofre un masivo motor V10 de 400 HP de 8,0 litros, acoplado a una transmisión manual de 6 velocidades. Si bien no era un auto para el día a día, el hecho de que podía pasar de 0 a 100 km/h en solo 4,6 segundos, lo convertía en un vehículo codiciado por aquellos fanáticos de la velocidad.
Un Lamborghini Diablo ofrecía en ese entonces 492 H P y 428 lb-pie, mientras que un Ferrari Testarossa (ambos con un V12) producía 428 HP; el Dodge Viper no sólo era el deportivo americano de calle más potente , era uno de los más impresionantes a nivel mundial.
En sus pasos siguió la fase SR II que apareció en 1996 con un motor ligeramente más potente (415 HP) . El SR II también vio el lanzamiento de la versión GTS, que tenía 450 HP (456 PS), así como la actualización de RT/10 en 1997 y el paquete ACR el año siguiente.
Para el 2002, el Dodge Viper en variante Roadster SRT10 recibía una segunda generación con un motor V10 de 8.3 litros más grande, produciendo 500 HP , así se convirtió en el primer Viper que pudo alcanzar 100 km/h en menos de 4 segundos.
Para el año 2007, el Viper recibía un motor aún mayor, el V10 de 8.4 litros y, como en su antecesor, el salto de potencia era de 100 hp más, logrando 600 caballos de fuerza y 560 lb-pie de par.
Se acercaba el final…
Luego de una pausa entre 2010 y 2013, apareció la tercera generación con 640 caballos y 600 lb-pie de par, la cual estuvo presente por breve tiempo bajo la submarca “SRT”.
El Viper, a pesar de tener unas impresionantes cifras en cuestiones mecánicas y hasta con un récord en Nürburgring se enfrentó a una caída en ventas y paros de producción. El propio CEO de Fiat-Chrysler, Sergio Marchionne, confirmaba que el deportivo americano más potente dejaría definitivamente la línea de montaje gracias a las nuevas regulaciones en seguridad, sin tener un sustituto en el mediano plazo.
