Tesla
surgió casi un siglo después de que comenzara el auge automotriz en los Estados Unidos . En esa época la zona de Detroit vio nacer a tres grandes empresas que dominaron el mercado por muchos años y que ahora cojean debido a las demandas de un mundo que busca menos emisiones en sus automóviles .
La firma de autos eléctricos, a diferencia de las más antiguas, con una visión de movilidad pro ambiente y de alta tecnología eligió la bahía San Francisco como su hogar. Lugar donde se reúnen empresas como Google, Apple y Facebook y profesionistas de la tecnología (programadores y desarrolladores, entre otros). Tesla tiene formas de trabajo más similares a ellos que a las firmas automotrices tradicionales.
Es en esta urbe donde el equipo de AUTOPISTAS probó, por primera vez para un medio mexicano, el Tesla Model 3 . El fabricante nos prestó una unidad de color rojo, con propulsión al eje posterior, y la misión de convivir 24 horas para determinar sus pros y contras.
Al abordar lo primero que destaca es la limpieza de su tablero, caracterizada por la ausencia de botones solo tiene el de las intermitentes que se ubica en el módulo superior del techo, junto al retrovisor y los focos de iluminación interior. Los demás controles se activan desde su pantalla central de 15 pulgadas o la app del celular. Pareciera un modelo conceptual, pero es real.
El poste central del volante cuenta con botones de control multifunción con los que se ajustan los espejos, y desde los cuales también se controlan posición del volante, volumen y selección de audio, así como la velocidad y distancia al vehículo al frente. El techo panorámico corre a todo lo largo de la cabina, desde el parabrisas hasta convertirse en el medallón.
Para acceder, simplemente hay que portar una tarjeta informática en la cartera que está rotulada con la marca de la empresa. La marcha del Model 3 se activa con un toque del freno; de la palanca de cambios al lado del volante se elige Drive y estamos avanzando. Dos toques de esta palanca hacia abajo activan el modo Autopilot , que mantiene al auto avanzando en el tráfico citadino, conservando el carril y la distancia al vehículo al frente.
Model 3
tiene más de 350 kilómetros con la carga inicial, suficiente para los recorridos del día. Después de tomar el vehículo nos desplazamos a la zona de miradores del Golden Gate.
La ruta pasa por zonas de altos pinares e interesantes curvas, a las que la suspensión del Model 3 en su calibración sport aprovecha alegremente. El paseo a bordo de esta unidad eléctrica se convierte en un goce de los sentidos por el sonido del viento y de su potente sistema de audio alimentado por canales streaming.
Algunos turistas y locales se acercaron para preguntar las prestaciones que este vehículo ofrece. Las cifras de aceleración de 0 a 100 km/h en 5.6 segundos actual (muy cerca de las cifras de un BMW 330 o un Audi A5) y las futuras planeadas, de 3.5 segundos, además de los ocho años de garantía en las baterías lo convencieron a varios de acudir a pedir su prueba de manejo.
Después de la visita al icónico puente, elegimos el siguiente destino, recibiendo constantemente pulgares arriba de transeúntes quienes observan la llamativa silueta del vehículo equipado para esta prueba con rines de 20 pulgadas.
Nuestra siguiente ruta nos llevó a la playa “Ocean Beach Fire Pits”, para llegar allí tuvimos que pasar una línea recta de 12 kilómetros fue el lugar perfecto para hacer la obligada prueba de Autopilot en esta unidad. Aquí pudimos volver a comprobar las ventajas de este poderoso sistema del Tesla Model 3.
Las recuperaciones del Model 3 son uno de sus valores añadidos, teniendo un desempeño de un sport sedán Premium acorde a su precio base, y un tratamiento de la suspensión al conductor acorde. Nuestro siguiente destino fue la fabrica de Tesla en Fremont para terminar el día.
A la mañana siguiente llegamos para realizar la sesión de fotos al frente de la planta, y encontramos el estacionamiento frontal totalmente lleno de vehículos de obreros y proveedores, además del flujo constante de camiones de carga, vacías entrando y llenas saliendo en los corredores que llevan a la planta. Como dato curioso el Tesla Model 3 ha destronado a la competencia en los Estados Unidos, pues según un reporte ha vendido más unidades que cualquier otra marca de este segmento premium.
Estando en sesión de foto se acerca un trabajador ataviado en camisa a cuadros, pantalón de mezclilla y botas de trabajo. Nos pregunta si el Model 3 era nuestro para después contarnos que el, recientemente había adquirido el suyo. Hizo eco, en ese momento, aquel principio de otro innovador de la industria, Henry Ford: "Quiero producir coches que mis trabajadores puedan comprar".
Después de convivir 24 horas con el Model 3 tuvimos que entregarlo en otra locación de Tesla. Este auto nos deja la impresión haber visitado un mundo futurista donde obreros pueden comprar vehículos que no emiten contaminantes y se recargan de energía en centros comerciales. Aún no se trata de una generalidad, pero Elon Musk trabaja para que así sea.
El Tesla Model 3 puede reservarse ya en México con una fecha aproximada de entrega entre la primavera y verano del año entrante.