La espera terminó para las huestes de Musk en territorio nacional, con la entrada en vigor del configurador de Tesla para el mercado mexicano . En lugar de acudir a una agencia, con los retos que esto conlleva, la armadora de Fremont vende sus vehículos a través de Internet, y el Model 3 está ya disponible en su página mexicana.
Sustituyendo a los (en ocasiones) aferrados vendedores que constituyen el sello de otras marcas y quienes empujan el inventario que a su distribuidor más convenga colocar, en el caso de Tesla la página permite seleccionar en libre voluntad la versión, color y equipamiento del sedán eléctrico.
Como si fuera un examen de la materia universitaria de costos, la gama de precios ilustrada contempla un volumen de ahorro en gasolina a cinco años, lo cual puede parecer desconcertante. La versión inicial, especificada con tracción trasera e interior estándar, e identificada con la denominación de “ Autonomía Estándar” se anuncia en 703 mil 400 pesos, pero el monto al cierre de la operación asciende a 835 mil pesos. La autonomía de la versión inicial es de 354 kilómetros y alcanza los 100 kilómetros por hora en 5.9 segundos. Para la versión inicial con tracción trasera, la cifra de aceleración es una décima más rápida que la de un Mercedes-Benz C300 2017 de tracción integral 4MATIC, un VW GTi manual del mismo año, o un Porsche Panamera en el año de su lanzamiento, 2011.
Tesla
ofrece hacia arriba de la gama la versión “Autonomía Estándar Plus ” anunciada en 748 mil 500 considerando los ahorros, y con monto de operación por 880 mil 500, con una autonomía de 386 kilómetros y aceleración 0-100 de 5.6 segundos. Por encima de esta versión el fabricante ofrece “Autonomía Mayor” con más de medio millar de kilómetros a carga completa, 523 para ser exactos, precio de 1 millón 17 mil pesos, y 0-100 de 5.3 segundos.
La armadora dispone de dos versiones con tracción en las cuatro ruedas: Autonomía Mayor, con precio de 1 millón 108 mil pesos, 499 kilómetros de alcance y 0-100 en 4.7 segundos. Como tope de gama para este modelo se halla la versión “Performance” con precio de 1 millón 358 mil pesos y una aceleración de 3.4 segundos. Esta cifra es idéntica a la de un Aston Martin Vantage, Lamborghini Huracán 580-2 Spyder, Camaro ZL-1 o Challenger SRT Hellcat.
En apoyo a quienes se hubieran atascado en la pesarosa frase de “Huy pero de aquí a que me lo manden” que caracterizó las conversaciones relacionadas con de Tesla durante el año pasado , la empresa incluye en su configurador los tiempos de entrega, que se hallan en lapsos de 6 a 8 semanas para las versiones de propulsión posterior, y de 2 a 4 semanas para las de tracción integral.
Para quienes nos vemos orillados a financiar nuestras adquisiciones, el configurador de Tesla también contempla elección de método de pago, con opción de contado, arrendamiento o financiamiento hasta 60 meses. El costo anual total lo definen en 11.9 por ciento.
Magia extra
Las tecnologías características del fabricante están disponibles a nivel opción en Model 3 , ya que la función de Autopilot está cotizada en 65 mil pesos. Si deseamos la experiencia completa de la autonomía total entonces añadiremos 108 mil, requiriendo obviamente las capacidades de Autopilot. El vehículo con este paquete podrá ser invocado vía un app en un estacionamiento y llegará por sí solo hasta donde el conductor se encuentre, y antes de que termine el año, el fabricante actualizará vía remota las capacidades de autonomía para reconocer señalamientos de alto y luces de semáforo, además de conducción autónoma citadina.
¿Pero qué pasa si…?
Ahora bien, para quienes no lo han conducido y asumen que el Model 3 es una especie de carrito de golf con sobreprecio, la armadora hace énfasis en las cifras de aceleración de 0 a 100 km/h de cada una de las versiones. AUTOPISTAS tuvo ya oportunidad de conducir este vehículo en los Estados Unidos y es una de las opciones más dinámicas y ágiles en su segmento de precio. Su marcha prescinde del rugido del motor de combustión interna, pero no por ello es silencioso a un nivel riesgo. La resistencia natural del aire, así como el contacto de las llantas, emiten un nivel bajo pero presente de ruido. La limpísima cabina tiene un criterio de diseño semejante al diseño de interiores nórdico, contando con UN botón en todo el tablero, ya que todos los controles están concentrados en la pantalla central. El configurador interno permite elegir modalidades de marcha, dureza de la suspensión y tono del volante, por lo que cada preferencia tiene cabida.
Para quienes temen la ominosa situación de quedarse sin energía, el Model 3 ofrece en todo momento, en marcha, estacionado y en el app dedicada, el medidor de consumo y previsión de alcance, además del mapa de navegación con cálculo de tiempos de recarga y localizador de puntos de abastecimiento. En una situación emergente basta parar un rato en un hotel o centro comercial con cargador regular “Destination Charging” de 240 voltios para en el lapso de una hora tener suficiente energía para continuar la marcha, pero el sistema previene sorpresas y sustos. Como ejemplo, si un conductor en Ciudad de México desea lanzarse de fin de semana a Acapulco, el calculador de ruta define para un Model 3 de autonomía mayor una recarga de 10 minutos en Chilpancingo de ida y otra de 50 minutos en el regreso para volver a la capital. Si queremos ir a la Costera Miguel Alemán bastará alargar un poco la primera recarga y mantener vigilado el calculador de energía, además de considerar que en Acapulco existen por lo pronto 9 puntos de recarga “Destination Charging”, por si acaso.
Un buen combinado resulta el adquirir un Tesla Model 3 , o bien alguno de sus compañeros de nicho impulsados por energía eléctrica, y si nuestra residencia y presupuesto lo permiten, instalar paneles solares para alimentarlo en el uso diario. No sólo prescindiremos del combustible fósil para nuestra movilidad privada, sino también en nuestro consumo energético doméstico. Además, reduciremos el impacto en nuestra economía personal debido a fluctuaciones en el costo de energía, usualmente derivadas de especulaciones en Wall Street y los caprichos de dictadores alrededor del mundo, mientras hacemos algo por preservar éste.