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Últimamente se han lanzado estudios sobre como la propiedad de automóviles disminuirá pues la gente prefiere usar servicios de transporte compartido. Aplicaciones como Uber y Cabify se presentan como opciones ante lo costoso de tener un auto, principalmente en grandes ciudades. Sin embargo, una investigación realizada por la agencia de seguros AAA, de Estados Unidos, revela que ser dueño de un auto sigue siendo una opción más rentable.
La agencia analizó el costo de los servicios de transporte en las 20 principales áreas urbanas de su país y lo multiplicó por 10 mil 841, que es el número de millas recorridas al año por un conductor promedio, según AAA que también tiene una fundación para la seguridad vial.
Se escogieron zonas urbanas porque son los únicos lugares donde los servicios de transporte están disponibles como una opción práctica a tiempo completo para moverse. Usando esa cifra, confiar en el servicio de transporte compartido costaría un promedio de 20 mil 118 dólares por año, 380 mil pesos aproximadamente.
Eso es más del doble del costo de poseer un vehículo personal, incluyendo los gastos de estacionamiento, combustible y seguro, que según AAA es de 7 mil 300 dólares, cercano a 138 mil pesos.
AAA sugiere que los conductores pueden minimizar los costos de la propiedad de automóviles comprando autos usados en buenas condiciones, evitando el uso de gasolina premium de alto octanaje a menos que sea necesario (o comprar un vehículo eléctrico, que ofrece menores costos de combustible y mantenimiento) y gastando dinero en mantenimiento de rutina.
