Una las partes más importantes para el correcto funcionamiento del coche son los neumáticos. Es por eso que cuidarlos debe ser prioridad para todos los automovilistas.
¿Te has preguntado qué pasa si las llantas de tu vehículo tienen más aire del que necesitan? Aquí en Autopistas te contamos cómo podría afectar tu seguridad.
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¿Qué pasa si las llantas de mi carro están muy infladas?
Alrededor de los autos existen varios mitos, algunos sobre la forma correcta de conducir y otros sobre el mantenimiento. Por ejemplo, hay personas que creen que las llantas sobreinfladas reducen su roce con el suelo y alargan su vida útil.
Sin embargo, no se recomienda rebasar los niveles de presión. El exceso de aire podría ponerte en peligro a ti y a tus compañeros de viaje, pues impide que trabajen adecuadamente.
Presta atención porque estas son algunas de las consecuencias más comunes de conducir con las llantas sobreinfladas:
- Desgaste irregular.
- Menor agarre.
- Riesgo de reventarse.
- Menor comodidad al conducir.
Para que un neumático tenga buena adherencia sobre la carretera debe cumplir con dos elementos. El primero es el estado en el que se encuentra, es decir que no tenga desgaste, la banda de rodamiento sea nítida y no haya presencia de chipotes.
De lo contrario, será necesario cambiarlas. Mientras que el segundo factor se relaciona con la presión, pues si las llantas no están infladas correctamente podría traernos consecuencias graves.
La condición de los neumáticos influye directamente en la seguridad de los pasajeros. ¿A qué se debe? En mal estado corremos el riesgo de ponchaduras, perder el control del vehículo y tener un accidente.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en 2022 se registraron más de 377 mil accidentes de tránsito. Si bien la mayoría de estos altercados fueron por error del conductor, cerca 4 mil se atribuyeron a fallas del vehículo, incluyendo las llantas.
¿Cuál es la presión de las llantas de un automóvil?
Para que lo tengas en cuenta, los coches de tamaño pequeño necesitan una presión de 30 psi, los vehículos medianos utilizan 36 psi y los automóviles grandes 42 psi, explica Kavak.
Cuidar los neumáticos y mantenerlos en las mejores condiciones posibles puede reducir los riegos que enfrentamos tras el volante. A continuación, te enlistamos algunos consejos que te ayudarán a cumplir dicha tarea:
- Revisa constantemente las llantas para localizar grietas, roturas u orificios.
- Reemplázalas cada 45 mil o 60 mil kilómetros, que corresponde a su tiempo de vida útil.
- Cuida tus hábitos de conducción para reducir el desgate sobre el asfalto.
- Lávalas y quítales el exceso de tierra o piedras.
- Realiza el servicio de alineación y balanceo.
- Asegúrate que los niveles de presión sean compatibles con tu auto.
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