Una de las grandes desventajas de los autos eléctricos es la complejidad para encontrar cargadores. En México, la infraestructura para este sistema aún es insuficiente e instalar uno en casa no siempre es la opción más rentable para los usuarios.
Pero eso no les resta su encanto: necesitan menos mantenimiento que los coches convencionales, tienen un excelente desempeño gracias a su diseño aerodinámico, reducen la emisión de contaminantes y permiten acceder a beneficios gubernamentales, como la excepción del pago de la tenencia y la verificación.
Y aunque cada vez son más las marcas de autos eléctricos que llegan a nuestro país para educarnos sobre su uso, la realidad es que sus componentes aún generan dudas. Por ejemplo, ¿qué hacer si la batería se agota y estás lejos de un punto de carga? En Autopistas te lo explicamos.
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Al igual que los dispositivos electrónicos modernos, el desgaste de la batería de un auto eléctrico se mide conforme los ciclos de carga. Este parámetro aumenta o disminuye su tiempo de vida útil, indica el blog de Volkswagen Canarias.
Factores externos (como el clima) también influyen en la duración de una batería de litio. En zonas con altas temperaturas se degradan rápido, y lo mismo sucede con ambientes extremadamente fríos.
En ese sentido, el fabricante alemán recomienda mantener la batería de un auto eléctrico entre el 20% y 80% de su capacidad. En promedio, su duración puede extenderse por 8 años o 150,000 kilómetros, lo que equivale alrededor de 3000 ciclos de carga.
Al cabo de estos ciclos, comienza a disminuir la capacidad de carga de la batería pasando del 100% al 75%. Por suerte, algunos fabricantes ofrecen garantía de por vida para reemplazar dicho componente cuando su desgaste sea demasiado notorio.
Como media, la autonomía de un auto eléctrico va de los 200 a los 500 kilómetros sin necesidad de cargar la batería, explica la aseguradora Mapfre España. Sería complicado fijar una distancia máxima, puesto que depende de los hábitos de conducción, el terreno en el que se conduce, el clima y hasta las condiciones del tráfico.
Pero como ningún auto es perfecto, ¿qué debes hacer cuando se agota la batería y no te encuentras cerca de un punto de carga? Primero, revisa si el fabricante ofrece servicio de grúa o de asistencia en carretera, de esta manera podrían auxiliarte.
Ni siquiera piensas en empujarlo porque, a comparación de un coche convencional, puedes dañar la batería, el motor o el inversor. Por tal motivo, es preferible contratar un servicio de grúa para que lo lleven a un lugar seguro e incluso te ayuden a trasladarlo al cargador más cercano.
Finalmente, recuerda que los fabricantes incorporan un buffer (dispositivo que se encuentra dentro de las baterías) y que impide que se descargue por completo. Para que no te quedes varado, revisa constantemente su porcentaje de carga y no permitas que llegue a los niveles bajos.
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