Si eres un usuario frecuente de taxis de aplicación o tienes algún conocido que recorre muchos kilómetros, es probable que hayas notado una especie de web cam pegada al parabrisas del auto. A esto se le llama dash cam y últimamente ha cobrado mayor relevancia pero, ¿cuál es su función?
De igual manera, varios autos nuevos también usan las cámara exteriores para esta función, como puede ser el caso de un Tesla. Su popularidad se debe a que proporcionan material audiovisual que puede ser útil en ciertas situaciones.
Lee también Calendario de verificación vehicular 2023 en la CDMX
¿Para qué sirve una dash cam?
Dado que las dash cams graban y guardan video, en caso de un accidente o que alguien quiera robar algo del auto, el contenido almacenado es de gran ayuda para las autoridades o aseguradoras. Además del material visual, comúnmente registran la velocidad a la que se viajaba, coordenadas geográficas y fecha.
Algunos modelos de cámaras incluso “vigilan” el auto incluso estacionado, con grabaciones que se eliminan automáticamente a excepción de cuando detectan un impacto. Desde otra perspectiva, taxistas o conductores de autos por aplicación pueden usarlas como evidencia del comportamiento de usuarios impertinentes o posibles asaltos, lo que les otorga un respaldo ante las autoridades.
Lee también Cadillac y Andretti Global entrarán juntos a la Fórmula 1
Esto cuestan
Las dash cams pueden adquirirse en tiendas de tecnología o en línea, con diferentes marcas, modelos y calidades de grabación. El precio dependerá de estos factores, pero pueden encontrarse desde menos de $1,000 hasta algunas más sofisticadas que sobrepasan los $3,000.
Para instalarlas, se sugiere hacerlo a la altura del espejo retrovisor. Esto proporciona una buena visibilidad hacia el exterior así como una posición central, ideal para conectarla a la toma de corriente de 12 volts. Algunos modelos requieren una instalación más compleja, con cableado que va directamente hacia el sistema eléctrico del auto.
Una dash cam puede ser un instrumento muy útil para deslindar responsabilidades en caso de un accidente, pues su evidencia se puede usar a tu favor. No importa qué tan buen conductor seas, los incidentes de tránsito le pueden ocurrir a cualquiera. Eso sí, cualquier uso malintencionado también puede ser sancionado, pues placas de autos y rostros de personas están totalmente expuestos.