Más Información
¿Aún no sabes qué regalar en Navidad? esta es la lista de objetos que deberías evitar, según la IA; descubre por qué
Del mercado al escenario; Los Temerarios cumplen el sueño de un pequeño fan en su concierto en el Estadio GNP
Comprar un auto , sin importar si es nuevo o usado, es sinónimo de un gran esfuerzo y también satisfacción. Metafóricamente hablando, hay quienes juntan el dinero en el cochinito para poder hacerse de un coche que resuelva sus necesidades.
Pero, como ocurre con cualquier proceso de compra-venta , existen marcos legales que regulan este camino en la adquisición de un vehículo que garantizan dinero limpio. Esto está establecido por el Servicio de Administración Tributaria en la Ley Federal para la Prevención e Identificación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita.
Lee también Qué hacer si mi auto no pasa la verificación vehicular
Este es el máximo permitido para comprar un auto en efectivo
Si por algún motivo decides adquirir un auto con efectivo, dicha ley establece que el máximo legal para pagarlo es de 3,210 Unidades de Medida y Actualización (UMA). Cada UMA equivale a $103.74, por lo que significa que se pueden pagar hasta $333,005.40 en efectivo.
Sin embargo, al momento de realizar transacciones en la agencia donde vas a comprar el coche en cuestión, suelen hacerse operaciones electrónicas con transferencias SPEI por seguridad. Este tipo de transferencias garantizan que la cuenta tenga fondos así como la rapidez en que ocurre el intercambio de dinero entre cuentas.
Esta cifra, otorgada por el SAT , aplica no solamente a autos nuevos, pues también es importante conocerla por si se decide comprar o vender un coche entre particulares o ante un lote de vehículos usados.
Lee también Así es el nuevo Hyundai Elantra 2024
Por otro lado, la ley mencionada también aplica al momento de adquirir un inmueble , joyería, arrendamiento de vehículos, servicios de blindaje, entre otros. Para evitar problemas fiscales y legales, es importante conocer lo que se establece antes de realizar una operación monetaria con terceras personas.