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La historia del Dodge Attitude lleva alrededor de una década escribiéndose, siempre bajo la tónica de echar mano de una marca asociada, en sus inicios Hyundai, luego Mitsubishi, pero siempre en el segmento de los sedanes subcompactos. La historia cambia y, como su nombre lo indica, un cambio de actitud se hizo presente para la tercera generación, pues ahora es más de todo: más grande, más potente y, posiblemente, más deseable.
Retrocediendo el tiempo al 2021, Dodge presentó la nueva Journey basándose en un producto de la marca china GAC. Ha demostrado ser una grata evolución del anterior modelo y, usando esa alianza, es que llega el nuevo Attitude con una receta similar, pero agregando un toque picante para enchilar el segmento de los sedanes compactos. Como dato curioso, platicando con Rafael Paz, Director de la marca Dodge, nos comenta que la relación con la china GAC ya tiene varios años, pues en sus fábricas producían modelos del Grupo para el consumo del gigante asiático.
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Voltéame a ver
El nuevo Attitude sin duda es un auto que llama la atención. En los pocos días con el que tuvimos contacto, muchas personas voltean a ver este sedán, muchos a bordo de modelos de la competencia. ¿Celos o curiosidad? De frente luce como un animal que está a punto de cazar a su presa, derivado de faros alargados y una parrilla de gran tamaño que asemeja una boca. A la par, hay varios conductos aerodinámicos en forma de rectángulo que se alargan al extremo de la fascia, en un acabado mate.
Los rines de 18 pulgadas en color negro generan un contraste con la pintura blanca del vehículo, así como el alerón sobre la tapa de la cajuela, exclusivo de la versión GT, que tiene ciertos tintes tuning. Acentuando ese carácter deportivo, cuenta con cuatro escapes reales cuyo sonido es ronco y puede apagarse a voluntad del conductor.
Moderno y diferente
Haciendo juego con el exterior, la cabina presenta colores y materiales que replican la imagen deportiva antes mencionada. Las vestiduras, en piel sintética, tienen contrastes en rojo a las orillas de los asientos así como en el tablero. Si se desea, puede ser totalmente negro. A la par de ello, existen diferentes zonas con símil de fibra de carbono y un diseño que va acorde a las tendencias actuales, con dos pantallas unidas y consola central flotante.
El cuadro de instrumentos tiene diferentes vistas, con la información necesaria para el conductor mientras que junto a ella está la dedicada al sistema de infoentretenimiento. Ambas son de 10.25 pulgadas, con buena resolución y agilidad. La central es fácil de usar y tiene varios atajos para ir a los menús más comunes. Sin embargo, solamente tiene conectividad para Apple CarPlay, pues aquellos que usamos Android tendremos que recurrir a Bluetooth para escuchar música.
Los espacios son generosos y los materiales de buena factura con una calidad de armado que se percibe sólida, con buena distribución de los mandos físicos para el aire acondicionado o los modos de manejo.
Cambio de actitud
Con el crecimiento de segmento es natural que también crezcan las capacidades dinámicas del Attitude, y es que ahora porta un motor 1.5 turbo de 168 hp que ofrecen una respuesta muy ágil. Sí, existe un notorio turbo lag pero es fácil adaptarse a jugar con la transmisión de doble embrague para aprovechar la entrada de la turbina. Tiene un empuje lineal, pero fuerte y la caja hace los cambios rápidamente, mientras que la dirección tiene tres niveles de firmeza para mayor control o facilidad de maniobrabilidad.
A pesar de que se ve muy bajo, no pega en topes o rampas pero sí ayuda a que el centro de gravedad sea más bajo para transmitir confianza al volante a la par de una suspensión que tiende a ser firme, mas no incómoda. Curiosamente, lleva llantas Michelin Pilot Sport 4, como declaración de desempeño.
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¿El nuevo rey del segmento?
El Dodge Attitude llega en tres versiones al mercado mexicano en una de las categorías más relevantes, pues existen nombres de tradición como el Volkswagen Jetta, Toyota Corolla o Nissan Sentra. Sin embargo, un diseño más arriesgado y propositivo, junto con sensaciones de manejo que invitan a la conducción y un completo paquete de seguridad pueden hacer que este nuevo sedán llegue a ser un éxito. Desde $399,900 ya se tiene acceso al motor turbo, seis bolsas de aire, pantalla de gran tamaño y buen espacio que, conforme se escale en las versiones, habrán aspectos adicionales de equipamiento hasta llegar a $488,900 en la variante GT, como la manejada.
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