La dinámica del Auto Show de Múnich es atípica para todos los involucrados. Para conocer el nuevo Porsche Mission R , tuvimos que salir del Messe München y trasladarnos a una locación remota, donde se encontraba un grupo selecto de periodistas y algunos de los ejecutivos más relevantes en el organigrama de la firma de Stuttgart.
Entre ellos, Detlev Von Platen , miembro del comité ejecutivo de Porsche en temas de ventas y marketing; o mejor dicho, el segundo al mando dentro de la enorme y delicada estructura de la marca alemana. Detlev Von Platen nació en Francia y tiene 57 años Sin embargo, su esbelta figura y el estudiado traje que viste para la presentación del Mission R lo hacen ver mucho más joven.
Apenas terminó la premiere global del primer deportivo de competencia que fabricará Porsche y Von Platen es comisionado a dar una serie de entrevistas privadas con los periodistas invitados a la develación del Mission R.
Dos horas después es mi turno y, tan pronto me recibe, me doy cuenta que el francés habla con un amable distanciamiento. En parte, por la rutina de entrevistas a las que ha sido sometido y también porque, a pesar de los estrictos controles sanitarios dentro del evento, hay reservas de tener una conversación más cercana con un periodista desconocido.
El guión del evento indica que tenemos que centrarnos a hablar el concepto que nos tiene reunidos. Sin embargo, al tener la oportunidad de platicar con alguien que conoce los detalles de la operación de Porsche, así como su devenir, decido tomar otro camino.
Le pregunto a Von Platen cómo le ha ido a Porsche en la aventura de vender autos eléctricos y de inmediato me doy cuenta de que este no es un simple vocero, pues el ejecutivo francés sabe de mercadotecnia, finanzas y de la importancia de la perspectiva del público.
“En términos de negocio, el Porsche Taycan ha sido un gran éxito para la marca. Incluso, mayor al que pensamos en un inicio. En los últimos seis meses hemos vendido más de 20 mil unidades de este modelo a nivel global y tenemos pronosticado que, para 2022, el 80% de nuestras ventas sea de autos electrificados. Es decir, 100% eléctricos o plug-in hybrids.
“No obstante, nuestra satisfacción va más allá de los números de ventas, pues cuando decidimos crear el Taycan , y debo admitir que no fue una resolución sencilla, no queríamos vender un eléctrico más, sino vender un Porsche eléctrico con todos los estándares de calidad que nuestros clientes y fans nos exigen.
“Hoy, estamos muy orgullosos de lo que hemos creado y nos hemos dado cuenta que si nos aferramos a los motores de combustión interna, perderemos relevancia entre el público y, por supuesto, también entre nuestros inversores”, señala Von Platen.
Al escuchar esto, le interrumpo y le pregunto si entonces podríamos esperar que Porsche tome un camino completamente volcado a la electrificación y si esta decisión obedece a un tema de satisfacción de accionistas.
Inmediatamente, genera una expresión de asombro y recula: “no, sin duda, nuestra principal prioridad es la imagen que tenemos con el público. Sin embargo, hemos notado que nuestros clientes están interesados en el tema de la electrificación.
“No obstante, te puedo asegurar que tenemos claro que hay una gran parte de nuestros clientes que también tienen un espíritu muy purista y lo respetamos mucho. Como muestra, el nuevo Porsche 911 GTR3 , el cual cuenta con la opción de ser comprado con transmisión manual cuando prácticamente nadie ofrece este tipo de mecanismo en la actualidad.
“En esta empresa tenemos una enorme responsabilidad de balancear nuestra herencia histórica y el desarrollo de tecnologías. Siempre hemos innovado y, en ese sentido, te puedo asegurar que Porsche debe de cambiar para seguir siendo Porsche”.
A medida que hablábamos de los planes de Porsche, como la venidera presentación de una Macan 100% eléctrica y la eventual electrificación del 911, el cual dice que será el último modelo de Porsche en tomar un sentido eléctrico, le pregunto a Von Platen cuáles son los aspectos mejorables de la compañía alemana.
Ya en un ambiente mucho más relajado que al inicio de la conversación, decide responder en dos partes. La primera, con un tono serio y, después, concluye con un mensaje digno de la siguiente campaña publicitaria de Porsche.
“Sin duda, tenemos una área importante de mejora en nuestra red de carga para vehículos eléctricos. Por el perfil de nuestros clientes, no podemos darles una experiencia incómoda mientras usan este tipo de vehículos. Ese es el siguiente gran reto de Porsche.
“Otro tema que tenemos que mejorar es el hecho de que somos la única marca en el mundo, cuyos clientes levantan el pedido de compra cuando tienen siete años, al verlos en un auto a escala o en un póster, y se los entregamos a los 50 años”.
Después de esta respuesta, le comenté que siempre estaba la opción de reducir los costos de sus vehículos, a lo que respondió: “Es muy complicado considerar ese camino, porque además de que todos los Porsche tienen lo más avanzado en tecnología, desempeño y sofisticación, en esta compañía creemos que solo la gente con grandes sueños es la que transforma al mundo y, en ese sentido, nos gusta creer que quien se compra uno de nuestros autos está cumpliendo un deseo de mucho tiempo atrás.
No en vano el 90% de todos los Porsche 911 que han sido fabricados, siguen en circulación”, concluye el ejecutivo.