Hace unos años, hubiera sido imposible imaginar que un auto eléctrico tendría la capacidad de partir del
centro de Los Ángeles, California, hacia las montañas de dicho estado en una ruta de casi dos horas
para llegar al circuito de Willow Springs , dar unas hot laps y, finalmente, regresar a la “ciudad de las
estrellas”.
No obstante, los avances tecnológicos que ha logrado Porsche en torno a sus paquetes de baterías nos
permitieron realizar llevar a cabo dicha rutina.
Este paquete de baterías está alojado en la más reciente versión del eléctrico de Porsche: el Taycan
GTS . Dicho modelo fue presentado en el Auto Show de Los Ángeles y, tan pronto fue develado, nos fue
asignado un ejemplar para manejarlo.
En su presentación, la noticia más sorprendente fue el anuncio de que su rango de autonomía ahora es
de 500 kilómetros y, aunque es ciertamente un impacto que marca el estándar contra su competencia,
pensar que eso es lo más importante del Taycan GTS es erróneo.
Como su nombre lo indica, el Taycan GTS se ubica como el punto medio entre la versión más
descomunal (en términos de potencia) y las versiones de entrada. No obstante, Porsche hace un énfasis
muy especial al señalar que este es su variante más orientada a la deportividad en pista.
Esto se hace evidente en algunos aspectos estéticos del auto como acentos en negro en la fascia
delantera, rines oscuros, pastillas de freno contrastantes con el color de la carrocería y elementos Sport
Design que anteriormente solo estaban disponible como equipamiento extra.
Con este tratamiento estético, el Taycan luce amenazante, listo para ser llevado a pista y sobre todo,
con un perfil mucho más deportivo. Además, Porsche aprovecha el lanzamiento de esta versión para
presentar una nueva carrocería en su portafolios.
Esta lleva por nombre Sport Turismo y tiene formas similares a las de una station wagon, pues la parte
trasera es más ancha, el espacio destinado a la cajuela es más ancho y la altura es ligeramente más
elevada que la versión sedán.
No obstante de este perfil más familiar, el Taycan GTS Sport Turismo mantiene muchísima personalidad
deportiva y en ningún momento luce como un vehículo aburrido.
No importa qué versión del nuevo Taycan GTS manejemos, las prestaciones son las mismas. El
paquete de baterías genera 590 caballos de fuerza , su capacidad de acelerar de 0 a 100 kilómetros por
hora es de 3.5 segundos y la velocidad máxima está topada en los 260 kilómetros por hora.
Al manejar este vehículo en carretera y en pista con un excepcional desempeño, es inevitable pensar
cuánta potencia extra podríamos requerir para estar satisfechos, pues honestamente la diferencia entre
éste ejemplar y la versión Turbo S de 670 caballos de fuerza pareciera mera vanidad.
Además, al estar perfilado como la versión “más deportiva”, este modelo goza de un sistema que
francamente es una locura y si no es bien administrado, resulta un peligro.
Se trata del sistema PSM, cuyas siglas representan oficialmente al “Porsche Stability Management”. No
obstante, al ser el interruptor que libera toda la potencia del Taycan GTS, los ingenieros de la marca se
refieren a manera de broma a él como el botón “Please Save Me” (por favor sálvenme).
Cuando apretamos este botón ubicado en el tablero de pantalla táctil, el auto no deja ningún tipo de
reserva en relación al poder. Las asistencias se desactivan y la electrónica no interviene para corregir el
rumbo del auto. Quien decide manejar en esta modalidad solo cuenta con la destreza de sus manos
para enfrentarse al Taycan y al camino.
Manejamos por el fascinante circuito de Willow Springs, el cual cuenta con curvas cerradas y una
pendiente de la cual los pilotos descienden, luego de una complicada vuelta a la izquierda. En esta parte
de la pista, es posible sentir una especie de ausencia en la respuesta del acelerador.
Esta es una manera en la que Porsche protege a los usuarios de no perder el control del auto ante la
capacidad de acelerar de manera súbita. Sin embargo, al activar el PSM, basta con tocar ligeramente el
pedal derecho para tener una sensación fascinante que mezcla la emoción de la velocidad y el miedo de
perder el control del auto.
El equipo de ingenieros de Porsche argumenta que esta función estuvo específicamente desarrollada
para el Taycan GTS, pues es la variante que los entusiastas de la conducción deportiva deberían de
tener. De esa manera, se reservará como algo exclusivo de esta versión.
Esta versión equilibra la tranquilidad de realizar recorridos largos, gracias a su impresionante cifra de
autonomía, y tiene toda la personalidad y herramientas para convertirse en el auto eléctrico favorito de
un petrolhead.
Su llegada a México está prevista a mediados del año siguiente con un precio menor que el del Taycan
Turbo S.