Con la compra de un auto viene también una enorme responsabilidad de cuidarlo y mantenerlo en buenas condiciones en la medida de lo posible, pues cuestiones como la seguridad, tiempos de traslado, practicidad y eficiencia, dependen totalmente del correcto funcionamiento del vehículo. Es por ello que en ocasiones queremos "consentirlo" y hacerle algunas modificaciones, pero vamos a decirte por qué debes pensarlo bien.
Con el paso del tiempo algunas piezas y elementos del auto se desgastan y tienen que ser reparados o reemplazados por nuevas, y su durabilidad depende totalmente del uso que se le dé al vehículo, cómo es tratado y la forma en que se conduce.
Cuando hay que hacer reparaciones muchas personas recurren a las modificaciones como una opción de renovar y cuidar su auto. Sin embargo, es algo que no siempre resulta tan conveniente. Aquí te contamos cuáles son las razones.
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Sabemos que puede ser muy tentador poner un escape deportivo a tu auto o usar ruedas más grandes en él, pero este tipo de modificaciones pueden provocar una caída en el ahorro de combustible de tu vehículo, según Scrap Car Network.
Esto se resume a dos cosas que sin duda es mejor evitar: menor rendimiento y un gasto mayor en gasolina y dinero.
Algunas modificaciones pueden hacer que tu auto sea menos maniobrable y más complicado de manejar, afectar la visibilidad, provocar que el coche tenga menor rendimiento y otras afectaciones.
Todo esto, lejos de ahorrarte trabajo y estrés al momento de conducir, hará que se vuelva una tarea más laboriosa y poco segura.
Si estás pensando vender tu auto a futuro, realizar modificaciones en él no es tan buena idea, ya que muchos compradores prefieren adquirir modelos sin modificación alguna.
Además, el hacerle cambios a tu vehículo no necesariamente acrecentará su valor sino que lo perjudicará, según el sitio web especializado en automóviles Motor Biscuit.
Desde piezas atractivas pero poco prácticas hasta cambios en los sistemas de frenado y conducción, muchas modificaciones pueden hacer que tu auto sea menos seguro que antes.
Una mala instalación, sistemas que no van acorde a tu vehículo o modificaciones que pueden entorpecer la seguridad predeterminada de tu coche (como cambiar los asientos y afectar la salida de las bolsas de aire), pueden causarte serios problemas.
También, por desgracia, una pintura demasiado atractiva o piezas de lujo pueden ser blanco fácil de los amantes de lo ajeno.
Muchas aseguradoras definen las modificaciones como un factor de riesgo adicional en las pólizas, considerando los autos modificados como inseguros.
Así que en caso de que requieras el seguro en una situación de emergencia, es posible que te lo nieguen o que no te lo apliquen si tu auto está modificado.
Así como lo lees. Algunas modificaciones en tu auto pueden hacerte acreedor a una multa por infringir el Reglamento de Tránsito de la Ciudad de México.
Hacer cambios como instalación de bandas de oruga, usar faros que afecten la visibilidad de otros conductores, usar neumáticos no adecuados, instalar sistemas antirradar, modificar el escape de gases, o usar vidrios polarizados puede provocarte pagar una infracción y afectar tu cartera.
Recuerda que la seguridad siempre es primero, y aunque sea divertido y satisfactorio hacer modificaciones a tu auto, lo mejor es que solamente cambies lo necesario para que se mantenga en buen estado.
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