La creciente tendencia de incorporar pantallas al interior de los autos a veces resulta excesiva. Se agradece cuando aquella destinada al infoentretenimiento es de buen tamaño, respuesta rápida y fácil de usar. Lo mismo ocurre con el cuadro de instrumentos, que añade información importante para evitar distracciones.

Pero por el otro lado, están las para el aire acondicionado, o menús que están ocultos en el sistema de entretenimiento , lo que obliga a alejar la mirada del camino. Esta es una tendencia que los fabricantes adoptan por querer hacer que el interior de sus autos luzcan ininterrumpidos.

Visualmente funciona, pero una vez que te sientas y quieres ajustar cosas tan simples como la temperatura del aire o apagar las luces, hacerlo mediante comandos táctiles o pantallas complica la labor . Esto obliga a desviar la mirada y, aunque existan íconos grandes o una respuesta háptica (que suena o vibra al oprimir), sigue sin ser igual de amigable que una tradicional perilla.

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Algunas marcas, como , entendieron este tema cuando quitaron el control del volumen táctil para regresar a la siempre confiable perilla. Aquí hay quien dice que es un elemento poco usado debido a los controles del volante, pero si queremos bajarle a la música en un solo movimiento, siempre es más sencillo girar los dedos que tratar de pulsar pausa en una pantalla.

Quizá sea un tema generacional, pero aún personas de menos de 30 años comparten esta idea. Es probable que se trate de costumbre o confianza en elementos físicos. Desde otra perspectiva, está la idea de seguridad. De acuerdo a un estudio realizado en Suecia por la revista , tener que controlar prácticamente todo desde la pantalla central requiere poco más de 23 segundos para completar una acción.

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Después de manejar varios autos, creemos que un balance entre mandos físicos y pantalla de infoentretenimiento que sea exclusiva para eso, con temas musicales y de algunos ajustes del auto, hacen que la experiencia sea más sencilla para toda clase de usuarios. Incluso, si se decide replicar la acción de botones y perillas en la pantalla es una buena alternativa para que cada conductor decida en dónde quiere usarlos.