Luego de haber inaugurado un punto de carga rápida de Tesla en Tepatitlán, Jalisco , el Secretario de Desarrollo Económico de dicho estado declaró que la política ambiental de la 4T habría ahuyentado la inversión de una fábrica de la compañía en el Bajío.
Sin embargo, fuentes cercanas a la firma de autos eléctricos desmienten esta teoría, pues en realidad nunca hubo intenciones reales de fabricar autos en México .
La fuente consultada señala que la decisión de Tesla por construir sus modelos en Texas obedece a factores de conveniencia logística y del mercado mismo, pues en dicho complejo se construirá la primera pick-up de la marca y ese estado representa el principal mercado de camionetas de trabajo en todo el mundo.
“El proyecto de construcción de la nueva planta es tan importante para Tesla que el propio Musk se mudará de California a Texas para supervisar su construcción. Honestamente, es difícil imaginar que Elon se mudaría a Guadalajara para revisar su desarrollo”, declaró la fuente.
Asimismo, la fuente consultada señala que el compromiso de la marca con el desarrollo de la red de infraestructura eléctrica en México es muy fuerte y prueba de eso, es la instalación del punto de carga rápida que se inauguró ayer.
La decisión de Tesla de seleccionar Austin, TX como ubicación para su siguiente fabrica, no estuvo relacionada en absoluto con ninguna política o situación en México, esto según una fuente familiarizada con el proceso de Tesla para selección del sitio.
“Los planes de Tesla en México son muy importantes y sinceramente no creo que el equipo de la marca en Estados Unidos esté al tanto de la política ambiental del Gobierno Federal, por lo tanto podemos descartar esa hipótesis”, concluye la fuente.