Más Información
¿Aún no sabes qué regalar en Navidad? esta es la lista de objetos que no deberías dar, según la IA; descubre por qué
Del mercado al escenario; Los Temerarios cumplen el sueño de un pequeño fan en su concierto en el Estadio GNP
Existe un viejo adagio que señala que “para ser el mejor, hay que competir con los mejores”.
Algo parecido sucede en el mundo de las pick-ups. Mientras hace una década cada marca navegaba en una zona de confort de saber qué papel jugaban en su nicho de mercado, a partir de las más recientes presentaciones de Ford F-150 , Chevrolet Cheyenne y RAM 1500 se ha desarrollado una intensa competencia para sobresalir.
Estas tres camionetas (con todas sus variantes) han elevado el nivel de equipamiento y desempeño para ganarse una identidad como “la más capaz”, “la más lujosa” o “la más tecnológica”.
Sin embargo, para el desarrollo de la gama Heavy Duty de RAM la encomienda fue reunir todas las virtudes con las que se identifica a la competencia (y a modelos propios de la marca) para crear una pick-up que sea la más avanzada, capaz y lujosa de todos los tiempos.
Para conocer este vehículo, la marca norteamericana nos invitó a Las Vegas, Nevada, para exponer su más reciente producto y demostrar que sus intenciones fueron adecuadamente logradas.
RAM
ha configurado la alineación de Heavy Duty con una serie de variantes que se identifican como 2500 , 3500 , y Power Wagon.
Dentro de estos modelos, los primeros que llegarán a nuestro país son las versiones 2500 SLT y 2500 Limited.
Ambas cuentan con un motor V8 Hemi de 6.4 litros que genera 410 caballos de fuerza y 429 libras pie de torque.
Probablemente, con el empleo de este mecanismo se genere la duda de sus “impresionantes prestaciones” como para ser denominada “la pick-up más potente de la historia”. Sin embargo, debemos de tomar en cuenta que para el mercado estadounidense RAM ofrecerá un motor Cummins de 6.7 litros que utiliza diesel para generar 400 caballos de fuerza y 1000 libras-pie de torque.
Este mecanismo difícilmente llegará a nuestro país, ya que, de acuerdo a declaraciones de ejecutivos de FCA Automobiles, la calidad de este tipo de combustible en México es demasiado baja por lo que podría generar problemas al funcionamiento del motor en un mediano plazo.