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Uno de los elementos que nunca pueden faltar en tu auto es una llanta de refacción y los accesorios para poder instalarla en caso de ser necesario. Y es que uno de los percances más comunes es la ponchadura de un neumático . No obstante, una vez que estés utilizando el repuesto es importante que lo retires y lo guardes lo más pronto que puedas.
Seguro cuando coloques la llanta de refacción te sentirás tranquilo y querrás seguir tu camino, ese y los próximos días sin preocupaciones. Lo que es más, si tus neumáticos ya no están en las mejores condiciones hasta podrías sentir un manejo más suave. Pero dejar esta rueda, aunque no lo creas, te pone en peligro .
Cuida de ti y los demás y aprende porque no debes circular por mucho tiempo utilizando el neumático de refacción.
Imagen: Pixabay
Tipos de llantas de refacción
Empecemos por mencionar que no todos los modelos de autos son iguales. Aunque la mayoría llevan la llanta de refacción en la cajuela, otros cuentan con compartimentos especiales para ocultarlas.
Asimismo, como explica la compañía Ford, cada neumático de repuesto brinda diferentes propiedades de acuerdo con su tipo pues las hay en diferentes versiones como:
Llantas iguales a las originales, es decir de tamaño completo.
Llantas del mismo tamaño, pero con diferentes características que la hacen más ligera o práctica.
Llantas de tamaño compacto, estas se conocen como tipo galleta.
Dado que cada una de ellas tiene distintos atributos, ventajas y desventajas es conveniente que conozcas el tipo de neumático con el que cuenta tu auto .
Imagen: Pexels
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Razones para no usar la llanta de refacción por mucho tiempo
Como sabes, una llanta de refacción sirve como sustituto temporal a los neumáticos de uso normal en caso de una ponchadura o avería de alguno de ellos.
Hay que decir que si bien la mayoría de estos neumáticos están diseñados para rendir más de 100 kilómetros, es aconsejable cambiarlos de inmediato pues solo deberían utilizarse en caso de emergencia, de manera temporal y únicamente para llegar a tu destino.
Las razones por las que no es bueno circular con una llanta de refacción por mucho tiempo son:
Si tienes una llanta tipo galleta:
El soporte no es el mismo. Como explica Ford, si una llanta es más pequeña que las demás, se genera un desgaste mayor en ella y la maniobrabilidad en el vehículo disminuye.
Inestabilidad del auto . Asimismo, una llanta de refacción de tamaño compacto, por razones prácticas, es más delgada y pequeña, por lo que se desbalancea el vehículo lo que puede ocasionar daños en la transmisión, la suspensión y los frenos.
Tiene menor adherencia . Por su delgadez, este tipo de llantas no brindan la adherencia óptima.
Menor capacidad de frenado. El conjunto de lo anterior genera dificultades al momento de frenar, por lo que es recomendable tener esto en cuenta.
Pero incluso si el neumático de refacción es de tamaño normal considera que muchos están diseñados con un material más liviano y tienen una profundidad de huella más pequeña con el fin de que sea sencillo colocarlas, por lo que no se recomienda usarlas por mucho tiempo o altas velocidades, explica Renault.
Y si crees que como tienes una llanta de tamaño y composición normal no pasa nada, malas noticias, si bien podrás recorrer más kilómetros la recomendación sigue siendo la misma, cambiarla en cuanto te sea posible.
La razón de lo anterior, como explica la empresa Bridgestone, es que las llantas deben cambiarse por pares y realizar la alineación y balanceo para que su desgaste sea similar. Si circulas por mucho tiempo con el neumático de refacción esta premisa ya no será válida.
Finalmente debes reemplazar y guardar la llanta de refacción porque, si llegas a sufrir una ponchadura , y ya estás utilizando el repuesto , no tendrás opción para actuar y deberás llamar a la grúa.
Imagen: Pixabay
Recomendaciones para usar la llanta de refacción
Ahora que conoces las razones por las que no es recomendable usar por mucho tiempo la llanta de refacción , también considera las siguientes recomendaciones :
- Cuando estés utilizando el neumático de refacción , por seguridad , no conduzcas a más de 80 kilómetros por hora.
- Cambia la llanta de refacción en cuanto puedas.
- Revisa constantemente la presión de la llanta sustituta , recuerda que algunas deben estar infladas a mayor presión
- Si la llanta ponchada es delantera Ford señala que es aconsejable sustituirla por una de tamaño completo trasera y colocar la de refacción atrás. Esto es porque así se disminuye la carga de peso y dirección en la llanta de refacción.
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