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Existen modificaciones que podrían dañar el funcionamiento orgánico de tu coche, pues no todos los modelos son candidatos para convertirlos en deportivos o más veloces. Cada marca tiene características especiales y estándares de aerodinámica que deben tomarse en cuenta.
A continuación te vamos a dar algunas de ellas y sus consecuencias.
Sistema de audio
Cuando se hacen modificaciones en el sistema de sonido se necesita, por ejemplo, de una fuente de poder, baterías de gel, capacitores de voltaje, así como buffers y, por tal motivo, requiere un trabajo excesivo de corriente, lo que podría desencadenar en un corto circuito y el fin de tu auto. Además, la Organización Mundial de la Salud autoriza 55 decibeles para no tener daños en la salud.
Si tu auto compite en eventos de audio, invierte el dinero necesario para equipo de calidad, de lo contrario, ni te arriesgues.
Llantas y rines
Hay personas que aman traer su auto sedán con llantas que bien podrían parecer de un tractor o parecer algo chaparro y extraño. Es importante saber que las llantas están implicadas en la eficacia de la gasolina, la suspensión, el frenado y requiere de birlos especiales. El problema es que si sales a carretera en ese auto con megallantas, será muy complicado y peligroso tomar las curvas y subir la velocidad. Tu seguridad está de por medio.
Quemacocos o convertible
Si se quiere adaptar un quemacocos tiene que realizarse con alguien especializado y con excelentes referencias, de lo contrario, el agua podría filtrarse; lo mismo pasa con el dueño que desea hacer de su auto un convertible: podría descuadrarse.
Fascias
Al realizar modificaciones del parachoques es muy común que tapen las entradas del aire que enfría el radiador.
Foco de luz xenón
No se recomiendan, también, por el sobrecalentamiento que generaría en el sistema eléctrico original por la corriente de trabajo que necesitas, además, se puede fundir el plástico del faro.
Tubos de escape
Aunque le hayas puesto un mofle que haga un sonido deportivo y logre voltear miradas, la realidad es que en cada verificación tendrás que retirarlo porque interfiere con la revisión de emisión de gases.
Alerones
Ponerle a tu auto alerones laterales, frontal y trasero de una manera equivocada sólo conseguirá poco control de tu coche, que raspe en cada tope, el desgaste irregular de tus llantas y mayor gasto de gasolina.
Antes de tomar una decisión pide orientación a los verdaderos expertos. Quizá tu coche sí sea candidato para alguna modificación... o no.
