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Hace más de un mes, Mazda y Toyota sorprendieron al mundo al anunciar una ambiciosa alianza de negocios y capital que establece una colaboración concreta dirigida a crear nuevas estructuras de valor para la movilidad del futuro y lograr un mayor crecimiento sostenible para ambas compañías. En el acuerdo se pactó establecer una planta conjunta que producirá vehículos en los Estados Unidos, desarrollar tecnologías para vehículos eléctricos, desarrollar tecnologías y sistemas de conectividad en conjunto y colaborar en tecnologías avanzadas de seguridad y productos complementarios.
Bueno, pues esa estrategia no se quedó ahí, y ahora las armadoras nos vuelven a sorprender y al incluir en la alianza a Denso, para el desarrollo de tecnologías en vehículos eléctricos, con el fin de ser una competencia directa con Tesla.
Las tres empresas han acordado establecer una nueva empresa como centro de desarrollo conjunto y comenzar proyectos cooperativos específicos para desarrollar conjuntamente tecnologías estructurales básicas para vehículos eléctricos . Además, las tres empresas también han decidido establecer una nueva empresa integrada por ingenieros seleccionados de las tres empresas para garantizar la ejecución eficiente de los proyectos conjuntos de desarrollo tecnológico.
A medida que los países y regiones de todo el mundo adoptan políticas cada vez más estrictas para ayudar a reducir los gases de efecto invernadero, están empezando a surgir nuevas regulaciones que obligan a tener un cierto volumen de ventas de vehículos eléctricos. La idea es cumplir con estas normas para el cuidado del medio ambiente garantizando el crecimiento sustentable de las empresas. Consideramos que los vehículos eléctricos son un campo tecnológico clave en este proceso, junto con los vehículos de combustión.
Por lo que Mazda, Denso y Toyota han decidido desarrollar conjuntamente tecnologías capaces de cubrir una amplia variedad de segmentos y tipos de vehículos para asegurar una respuesta flexible y rápida a las tendencias del mercado.
Este acuerdo cubre una amplia gama de modelos , desde subcompactos hasta vehículos de pasajeros, SUVs y camiones ligeros, teniendo como objetivo innovar el proceso de desarrollo, combinando los puntos fuertes de cada empresa, incluyendo la planificación de productos de Mazda y el desarrollo de modelos basados en computadoras, las tecnologías electrónicas de Denso y la plataforma de la Nueva Arquitectura Global de Toyota (TNGA) por sus siglas en inglés.
La nueva empresa se ocupará de la investigación de las características (arquitectura común) que define el rendimiento óptimo y las funciones de los vehículos eléctricos desde el punto de vista tanto de los componentes individuales como de todo el vehículo, la verificación de la instalación de los componentes y el rendimiento del vehículo, y pruebas del concepto óptimo para cada clasificación de automóvil con respecto a cada componente y cada tipo de vehículo realizado mediante los resultados de los puntos.
A través de este proyecto de desarrollo tecnológico conjunto, y dedicando una cantidad igual de recursos de desarrollo, garantizando procesos de desarrollo eficientes y aprovechando las instalaciones de producción existentes, Mazda y Toyota tienen la intención de concentrar sus recursos en los valores fundamentales de los vehículos , para así permitir la creación de autos eléctricos atractivos que encarnen las identidades únicas de cada marca.
Las empresas también tienen como objetivo crear una estructura de negocios que esté abierta a la participación de otros fabricantes de automóviles y proveedores.
Mazda y Toyota han tenido una relación conjunta en los últimos años, como recordaremos en México, Mazda fabrica en Salamanca el Mazda 3 y el Mazda 2 y mediante una inversión de Toyota, esa planta también construye el Yaris R.
