No es sorpresa que las marcas empiecen a eliminar ciertas motorizaciones de su gama debido a temas de emisiones. En esta ocasión, Maserati es quien elimina el V8 de su gama al fabricar el último Quattroporte con ese motor.
Se trata de una edición especial, cuyo dueño adquirió también una versión limitada del MC20, con una ceremonia que despide el V8 de origen Ferrari para optar por mecánicas más pequeñas.
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Nombrado Maserati Quattroporte Grand Finale, se trata del último ejemplar del sedán en portar un V8. Está pintado en un tono azul marino especial y lo combina con detalles en fibra de carbono. Lo que lo vuelve aún más especial es la placa con el número de serie 999,999 en el motor firmada por el equipo de la marca.
Emblemas Grand Finale pueden ser encontrados por todo el auto pero lo que resulta más interesante es el V8 de origen Ferrari, que genera 580 hp y 538 lb-pie de par. De momento, no se sabe si habrá un Maserati Quattroporte eléctrico o híbrido.
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Por otro lado, aprovechando la ocasión, el cliente también adquirió el coupé MC20 con un alto nivel de personalización, en color azul claro con franjas blancas. A diferencia del Quattroporte, usa un V6 twin turbo de 630 hp.
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