Autopistas

Los peores muscle cars de la historia

A pesar de su interesante diseño, estos modelos pasaron a la historia por dar más problemas que satisfacciones a sus dueños

Los peores muscle cars de la historia
29/11/2019 |16:05Diego Guilbert |
Redacción El Universal
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Como la historia de la industria automotriz nos lo ha enseñado en más de una ocasión, las tendencias del mercado suelen tener temporalidades que todas las marcas buscan explotar.

A causa del fenómeno comercial que resultó la presentación del Ford Mustang en la mitad de la década de los sesenta, en años siguientes prácticamente todas las marcas intentaron robarse una porción del entonces popular segmento de

Como consecuencia, en la década de los setenta se presentaron una serie de modelos que resultaron poco atractivos para los clientes por su pobre comportamiento en pista o por los problemas mecánicos que estos tenían en su uso cotidiano.

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Por esa razón, presentamos los peores de la historia.

Los peores muscle cars de la historia

Chevrolet Monza Mirage 1977

A pesar de ser un excelente sucesor al Chevrolet Nova en su primera generación, la segunda etapa del modelo estuvo a cargo de una compañía externa denominada Michigan Auto Techniques, quienes se encargaron de arruinar el encanto de este auto.

Para 1977, el Monza Mirage contaba con un motor V8 que generaba apenas 145 caballos de fuerza. Su diseño lucía imponente y destacó por la estilización de trabajos de pintura de edición especial. Sin embargo, era muy pesado y el comportamiento en carretera dejaba mucho que desear.

Los peores muscle cars de la historia

Chevrolet Citation X-11

El Citation fue un muscle car compacto con tracción delantera que se produjo entre 1980 y 1985 con una carrocería que parecía tomar inspiración en las formas de un hatchback.

Tenía un aspecto de coche deportivo bastante interesante, sin embargo, contaba con un motor V6 que generaba solo 135 caballos de fuerza. Además, las ambiciones del equipo tecnológico si bien fueron innovadoras para su época, no eran las más amigables con sus dueños.

Entre ellas, estaba un sistema de suspensión afinada, una dirección asistida y frenos de alto desempeño que eran difíciles de reparar.

Los peores muscle cars de la historia

Buick Gran Sport 1977

Buick presentó el Gran Sport tomando como base el Century que había tenido éxito con anterioridad en el mercado estadounidense.

Desafortunadamente, desapareció el poderoso bloque grande 455 que originalmente equipaba a este auto en 1970 y solo se quedó disponible un 350 V8 que entregaba 175 caballos de fuerza.

No hace falta decir que el Grand Sport de 1975 era un muscle car extremadamente lento porque pesaba casi dos toneladas.

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Mercury Capri RS

La introducción de la tercera generación del Mustang tuvo una gran influencia en la extinta marca Mercury. De hecho, la marca obtuvo su propia versión de este muscle car bajo el nombre de Capri en 1979.

Aunque de 1970 a 1977, Mercury vendió el Capri como un modelo importado de Alemania con motores de cuatro y seis cilindros en 1979, gracias al Mustang, el Capri cambió totalmente para tener un diseño totalmente nuevo.

Al tratarse de un Mercury tenía mejores acabados que el Ford, pero fuera de unos pocos cambios estéticos, era idéntico al Mustang. Como una versión de rendimiento, Mercury presentó el modelo RS que contaba un motor turboalimentado de 2.3 litros que entregaba solo 135 caballos de fuerza. Como era de esperarse con ese motor, el rendimiento era muy malo.

Los peores muscle cars de la historia

Mercury Cougar 1974

Mercury presentó el Cougar de tercera generación en 1974 y este modelo marcó su salida de la producción de rendimiento del pasado, ya que no basaron el auto en la plataforma del Mustang, sino que se creó un chasis más grande y pesado.

Esto representó que los Cougar se manejaran como “lanchones”, a pesar de que Mercury intentó venderlos como autos deportivos. Incluso con su V8 de 220 caballos de fuerza, los tiempos de aceleración eran decepcionantes.