Manejar un auto es una responsabilidad enorme, tanto para los ocupantes del auto como para todas las personas alrededor. Si bien, alrededor del mundo se usa la misma licencia para conducir sin importar las cualidades dinámicas del auto, en Australia habrá un cambio de reglas.
La intención es que autos deportivos entren en una categoría especial, donde se validen las habilidades de los conductores para manipular altos niveles de potencia, entre otras reglas para prevenir accidentes.
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Concretamente, será el sur de Australia quien está en miras de implementar este nuevo esquema de licencias para conducir que también contenga multas más fuertes para quienes rompan la ley.
El motivo contextual de esta jurisdicción es que en 2014, una adolescente de 15 años murió tras ser atropellada por un conductor de un Lamborghini Huracán que se subió a la banqueta en la ciudad de Adelaide.
Tras protestas y solicitudes de la familia afectada, el gobierno de esa ciudad tendrá las licencias de manejo UHPV (Ultra High Power Vehicles), que acomoda a los vehículos con más de 370 caballos de fuerza en esta categoría.
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Independientemente del curso en línea para concientizar a los conductores de autos deportivos, las multas serán más severas a comparación de los autos normales. En calles y caminos públicos será obligatorio mantener encendidos el control de tracción y estabilidad además del ABS. En caso de romper esta regla, la multa es de $5,000 dólares australianos, que equivalen a $56,651 pesos mexicanos.
Por otro lado, en caso de que alguien resulte herido o pierda la vida en un accidente, la pena incluye prisión hasta por 5 años, pero podría aumentar según la gravedad del accidente o si hay presencia de sustancias en la sangre.