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No todos podemos ser Jay Leno, Nick Mason o Lorenzo Zambrano. Por lo cual, si acaso tenemos un auto en qué movernos, para los más dedicados quizá hay uno o dos proyectos de restauración adicionales, y hasta ahí.
Pero más allá de las limitantes del mundo real a escala 1:1, la alternativa más económica (a excepción de claudicar) es la micronización. Muchos de quienes gustamos de los autos tuvimos la oportunidad de acercarnos desde temprana edad a su teoría y práctica a través de los juguete s, por lo que al ir creciendo y accediendo a presupuestos más generosos, habemos quienes asignamos una partida a la constante adquisición de más novedades a escala.
Quienes piensen que esto es algo infantil pueden darse cuenta que hay más que lo aparente en esta actividad acudiendo a una de las distintas convenciones de coleccionistas , donde se comercializan entre particulares modelos históricos y escasos.
Hay un gran abanico de opciones, desde lo más cercano a lo más exótico. Aquí te presentamos algunas de las que puede considerar para entregarte sin reparos a este hábito que tiene mucha afición en todo el mundo:
Hot Wheels.
Esta marca ha producido seis mil millones de carritos y el año pasado alcanzó el medio siglo de operaciones. Su línea de producto estrella es el auto metálico a escala 1:64, en modelos tanto basados en la realidad como en diseños propios de fantasía, y también ofrece escala 1:18 así como pistas y otros accesorios. Es la marca más fácil de encontrar, pues se halla en la mayoría de los supermercados y tiendas departamentales en nuestro país, en donde los aficionados examinan y colectan las novedades recién desempacadas. Líneas de edición limitada se lanzan en colaboración con títulos de cómic y películas o de videojuegos. En distintas plazas así como en redes sociales se halla también un canal complementario, donde coleccionistas revenden piezas de interés ya sea porque resultan escasas o son parte de ediciones limitadas.
Majorette.
La opción francesa en escalas está en este fabricante, con operaciones desde 1961 pero comenzando con autos en 1964, ya que originalmente iniciaron con trenes. Esta marca tiene poco tiempo de haber vuelto al mercado mexicano, para gusto de los coleccionistas. Aunque con un precio de venta más elevado que sus competidores más extensos, sus modelos incluyen una pequeña tarjeta técnica además de que tienen funcionalidades como apertura de puertas, caja de carga en los SUV o, bien, tapa del motor en el caso del Lamborghini Huracán.
Tomica.
Si desde la tierra del sol naciente llegan tan notables productos automotores, obviamente estarían representados por una estrella de las escalas, y es Tomica.
También inició produciendo trenes, y aunque comenzó a operar en 1924, fue hasta 1970 que incursiona en los autos. La marca se caracterizaba por ofrecer modelos de automóviles nipones, para posteriormente incluir en su línea productos de Volkswagen, Jeep, Fiat, Mercedes-Benz y Audi. Esta marca ya había probado la herramienta de la producción audiovisual para impulsar sus ventas, a través de una serie infantil de acción viva: “Tomica Rescue Force”.