Sin lugar a dudas, uno de los hombres más influyentes, trascendentes y con mayor riqueza personal en el Siglo XXI es Elon Musk. Su excentricidad, sus ambiciones fuera de proporción y su legado en función de una movilidad menos contaminante lo han convertido en un constante foco de atención mediática en los últimos años.
Sin lugar a dudas, algunos de sus aportes a las industrias aeronáutica y automotriz califican como históricos y han provocado grandes cambios. Tan solo en el mundo de los autos, Elon Musk puede ser señalado como el principal responsable de que las más grandes compañías automotrices aceleraran su transición al uso de la electricidad como forma de impulsar a sus vehículos cuando, por muchos años, estas lo habían desestimado.
No obstante, al ser parte de tanto protagonismo (muchas veces buscado por él mismo), el sudafricano ha cometido errores que le han costado dinero, lo han hecho quedar en ridículo y lo han vuelto objeto de burlas. He aquí algunos de ellos.
El choque del McLaren
Elon Musk siempre ha sido un fanático de los autos. Especialmente, de los de corte deportivo con prestaciones extraordinarias y en 1999 el auto que reunía diseño, potencia y exclusividad de mejor manera que todos era el McLaren F1.
Este proyecto de la firma británica se convirtió en un objeto del deseo entre los millonarios y los amantes de los autos, por lo cual cuando Elon vendió su participación en PayPal compró
El auto estaba destinado a ser usado como su auto diario. Sin embargo, Musk no tenía tanto conocimiento de cómo manejarlo. La consecuencia: a los pocos meses de uso, el futuro fundador de Tesla lo chocó de manera considerable.
Para colmo de los males, este modelo no contaba con una póliza de seguro, por lo cual la reparación del vehículo fue un gasto importante que Musk tuvo que hacer con su propio bolsillo. Más adelante, Elon Musk compró otro McLaren F1 y ahora sí, lo aseguró contra cualquier tipo de accidente.
Depreciación de las acciones de Tesla por error
Antes de la presentación de sus Model 3 y Model Y (los modelos con mayor éxito comercial en la historia de Tesla), Elon Musk tuvo uno de los episodios más extraños en su carrera pues, además de utilizar Twitter como su plataforma preferida para compartir sus gustos personales, la empleó como herramienta especulativa para el valor de las acciones de su compañía.
Luego de presentarse en un podcast fumando marihuana, el excéntrico multimillonario llamó la atención del comité directivo de Tesla al considerar que no era una conducta adecuada para el dirigente de la compañía. En su carácter irreverente, Elon Musk desestimó su molestia y por el contrario, decidió tuitear que, dentro de poco, Tesla entraría a la bolsa y cada una de las acciones costaría 4 dólares con 20 centavos, en referencia a la cifra 4/20 que se asocia a la cultura del consumo de cannabis.
Muchos de los aficionados de Tesla y del personaje de Elon Musk aplaudieron esta actitud. Sin embargo, tuvo consecuencias importantes para la marca pues, al hacer su entrada a la bolsa unos meses después de este tuit; la Comisión de Bolsa y Valores de NY (SEC por sus siglas en inglés) multó a Tesla con 20 millones de dólares por generar confusión y una expectativa falsa en el valor de la compañía.
En la actualidad, una acción de Tesla tiene un valor que supera los 10 mil dólares.