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Dadas las nuevas, y cada vez más estrictas, regulaciones de emisiones que hay en Estados Unidos y Europa, Dodge planea una invertir en diferentes formas de electrificación para que estas reglas no terminen por desaparecer sus modelos de rendimineto e icónicos muscle cars. Así lo aseguró uno de sus principales ejecutivos en una entrevista con Automotive News.
"Creo que el futuro absoluto es la electrificación de estos autos. Eso no es necesariamente malo. Podría ser eléctrico, podría ser híbrido enchufable, podría ser híbrido regular, podría ser e-ejes, cualquiera de las tecnologías eléctricas. Pero creo firmemente que la electrificación será la clave para un alto rendimiento en el futuro", afirmó Tim Kuniskis, jefe de automóviles de pasajeros de Fiat- Chrysler Automobiles (FCA).
El costo de la tecnología de electrificación sigue siendo un problema. Dodge aún no ha lanzado un auto electrificado de rendimiento porque la tecnología sigue siendo demasiado costosa según palabras del ejecutivo. Reconoció que un motor híbrido agrega un nivel de rendimiento que no está disponible en un auto con un gran V8; citó el Porsche 918 Spyder, el Acura NSX y el Ferrari LaFerrari como ejemplos.
"Hay absolutamente una ventaja de rendimiento, solo es una cuestión de cuándo el consumidor lo aceptará. Y creo que tan pronto como bajen los precios, se convertirá en una opción viable para todos", concluyó.
Sus comentarios sugieren que las variantes actuales del Charger y el Challenger no serán electrificados antes del final de su ciclo de producción. Sin embargo, se cree que su sucesor está en obras, y esos modelos recibirán algún tipo de electrificación . Se espera que lleguen a principios de 2020.
