Además del aceite, el anticongelante es uno de los líquidos esenciales para el funcionamiento del auto. Este producto es básico para el sistema de refrigeración del motor, ya que previene el sobrecalentamiento o problemas derivados por las condiciones de temperatura.
Pero, ¿sabes realmente cómo usarlo? Descubre en Autopistas con qué frecuencia cambiarlo.
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El anticongelante, también conocido como líquido refrigerante, circula a través del sistema de refrigeración del motor y está diseñado para prevenir el congelamiento y sobrecalentamiento del motor, explica la marca estadounidense Dodge.
Su función principal es regular la temperatura del motor, permitiéndole funcionar de manera óptima en diversas condiciones ambientales.
Se compone de una mezcla de agua con aditivos químicos, como etilenglicol o propilenglicol, que modifican sus propiedades térmicas y anticorrosivas, disminuyen el punto de congelación del agua y elevan su punto de ebullición.
Al usar un vehículo es normal que el motor se caliente. Lo que el anticongelante hace es circular por los conductos del sistema de enfriamiento para absorber el calor y transportarlo hacia el radiador.
Una vez que se libera el calor, el anticongelante regresa al motor para reiniciar este proceso y cumplir con su función.
Probablemente has visto que los anticongelantes vienen en distintos colores y ello se debe a los componentes químicos con los que se fabrica. Además, el color permite que sea más sencillo identificar una fuga en el sistema de refrigeración del auto.
La marca alemana Volkswagen explica en su blog que los principales tipos de anticongelantes que encontramos en el mercado son:
Para saber qué tipo de anticongelante necesita tu vehículo, te recomendamos consultar el manual de usuario.
La vida útil del anticongelante depende del tipo y la calidad del producto, pero la mayoría de fabricantes recomiendan cambiarlo cada 2 años o 40,000 kilómetros.
Volkswagen sugiere revisar los niveles de este líquido cada vez que acudas al servicio de mantenimiento. ¿Vas a checarlos tú? No olvides apagar el motor y dejar que se enfríe.
Luego, identifica el depósito del anticongelante, que se encuentra cerca del motor y el radiador (algunos suelen tener las etiquetas "Coolant" o "Refrigerant").
Después que ubiques este depósito, revisa que el líquido refrigerante se ubique entre las marcas de mínimo y máximo.
Si los niveles del anticongelante están bajos y necesitas cambiarlo, es recomendable acudir a un taller y solicitar este servicio para evitar posibles daños al motor.
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