Las pastillas de freno son una parte crucial de nuestro vehículo ya que su buen estado determinará que hagamos frenadas precisas, por lo que es importante estar al pendiente de ellos en cada revisón que se le hace al auto.
En la ciudad, las pastillas de freno se desgastan con más rapidez que en carretera por los constantes arranques y frenadas que los automovilistas hacen (sin contar el tráfico de la ciudad). Sin embargo, no existe un dato exacto de kilometraje para saber cuándo sustituirlas , por lo que te explicamos unos indicadores para que sepas cuándo es el momento de hacerlo.
Cuando frenamos las pastillas se aprietan contra el disco y el rozamiento que aparece va frenando el giro del disco, el cual provoca fricción al reducir la velocidad . Por lo tanto la llanta se va deteniendo poco a poco hasta lograr una estabilidad en el coche.
Algunos autos cuentan con sensores de pastillas de freno que informan al conductor cuándo están desgastadas a través de una luz en el tablero o un mensaje que se muestra al arrancarlo. Otros sistemas de frenos emiten un sonido que es causado por un raspador de metal conectado a las almohadillas que sirve como alarma de advertencia.
Si el ruido es menor, esto quiere decir que los cojines de una o de todas las ruedas pueden desaparecer por completo y el uso adicional de los frenos puede causar un daño grave a los rotores . En cuanto escuche este sonido, deberás llevar tu vehículo con el mecánico.
Para asegurarse de que el automóvil siempre pueda ejecutar de manera consistente las paradas de manera más rápidas y seguras posibles, te recomendamos cambiar las pastillas de freno antes de que presenten las irregularidades mencionadas.
Hay que tener en cuenta que las pastillas delanteras se desgastan con mayor facilidad que las traseras porque sufren un desgaste del doble. Te aconsejamos revisar con frecuencia su estado.