Cuando le damos mantenimiento al auto priorizamos el cuidado de la carrocería para que luzca impecable. Pero si volteamos un poco más abajo nos encontraremos con los neumáticos, esa parte del vehículo que recibe impactos, raspones y golpes durante la conducción.
De primera instancia, sabemos que las llantas en mal estado pueden presentar fisuras, grietas, malformaciones, menor nitidez en la banda de rodamiento y un aspecto opaco. En este caso, es más que evidente la necesidad de reemplazarlas, ya que así podremos tener mayor seguridad y mejor desempeño en la carretera.
Pero ¿cómo saber si aún te “aguantan” más tiempo? Aquí tendrás que inspeccionar estos elementos que en Autopistas te diremos.
Llantas del auto. Foto: Freepik
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De acuerdo con el blog de Ford México, las llantas del auto son más que un mecanismo para la movilidad del vehículo, sino que cumplen diversas funciones entre las que podemos mencionar:
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- Seguridad: Los neumáticos brindan estabilidad y control en la carretera. Gracias a ellas obtenemos tracción y capacidad de frenado, especialmente en condiciones de lluvia o ante superficies resbaladizas.
- Desempeño: Elegir el tipo de llanta adecuada para tu auto favorece la respuesta del vehículo al conducir, proporciona mayor adherencia y evita los obstáculos en terrenos irregulares.
- Ahorro de combustible: Los neumáticos reducen la resistencia al rodamiento, lo que se traduce en mayor aprovechamiento del combustible. Así, el motor trabaja conforme su capacidad y no a marchas forzadas.
Pero como todo componente, las llantas también cumplen su ciclo de vida que, de acuerdo con el fabricante Michelin, va de los 5 años a los 10,000 o 50,000 kilómetros. Si aún con ello no presentan signos de desgaste, es preferible revisarlas con frecuencia.
Llantas del auto. Foto: Freepik
- Banda de rodamiento nítida: La profundidad mínima recomendada de la banda de rodamiento debe de ser de al menos 1.6 mm. Si percibes que los patrones ya no son nítidos, es momento de reemplazarlas.
- Presión adecuada: Los neumáticos deben estar inflados con la presión recomendada por el fabricante. Se deben sentir firmes y con buen nivel de rebote.
- Desgaste uniforme: Lo ideal es que las llantas se desgasten de manera uniforme en toda su superficie. Un desgaste irregular puede indicar problemas de alineación, balanceo o en la suspensión del vehículo.
- Balanceo y alineación: Las llantas que están bien balanceadas y alineadas no producen vibraciones al conducir. Acude con un especialista para que realice ambos servicios mínimo dos veces al año, sugiere el fabricante Bridgestone.
- Sin objetos incrustados: A través de una inspección visual puedes detectar objetos que se hayan enterrado en los neumáticos: clavos, piedras, vidrios, etcétera. La pérdida de aire también es un signo de que la llanta está “ponchada”.
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