Los automóviles son como una máquina perfectamente creada: todos sus componentes y sistemas se encuentran conectados para darnos eficiencia en la conducción.
Cada sistema cumple con una determinada función por más pequeño que parezca. Y hay otros que se hacen más evidentes por los beneficios que nos dan, tal es el caso de la suspensión.
Inevitablemente, llega un punto en que la suspensión del carro resulta dañada. Pero no te preocupes porque hoy te explicamos cómo detectar este problema.
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Cuando recién vamos comenzando a manejar o queremos dominar el mantenimiento de un auto, el primer elemento que salta la vista es la suspensión.
Su importancia es mucho más grande de lo que imaginas. De acuerdo con Kavak, se trata del sistema que conecta a las llantas, resortes y amortiguadores que unen al vehículo con sus ruedas.
Su función principal es la de absorber los golpes y las irregularidades del camino. Aquí recae la fuerza de los movimientos que registra un auto, por ejemplo, al caer en un bache o grieta.
También actúa como un “colchón” que nos da estabilidad dentro de la cabina. Lo que nos garantiza un modo de conducción seguro, cómodo y muy suave. De ahí la importancia por mantenerla en buenas condiciones.
Cuando la suspensión falla nuestro automóvil pierde agarre sobre la carretera. A su vez, esto termina afectando otros componentes como las llantas y los amortiguadores, pues quedan desprotegidos contra los golpes.
No necesitas ser un experto para reconocer cuando la suspensión del auto está fallando. Lo único que debes hacer es afinar tus sentidos para reconocer las siguientes señales:
Tras la aparición de rechinidos o golpes al atravesar topes, deberás programar una cita en el taller mecánico para que revisen la suspensión.
Otro síntoma de este problema es percibir que tu carro “se cuelga” más de un lado. Es el doble de notorio cuando el vehículo se encuentra en reposo, indica la marca Mobil.
Los neumáticos se van desgastando de manera uniforme. ¿Te has dado cuenta que uno está más acabado que el otro?
Primero revisa que tengan el mismo nivel de presión y que no se hayan ponchado; si el problema continúa, dale una revisada a la suspensión.
El fabricante de refacciones Moog Parts señala en su sitio web que un volante duro podría advertirnos sobre fallas en la suspensión. Especialmente, cuando conducimos a bajas velocidades.
Aquí debemos revisar el problema de inmediato para no ponernos en peligro.
¿Tu carro se va hacia delante cuando frenas?, ¿se jala para atrás al acelerar? Corre con tu mecánico de confianza porque, como lo mencionamos anteriormente, la suspensión nos debería dar suficiente estabilidad.
¡No lo pienses dos veces! Percibir estas señales nos pone cara a cara con un problema en nuestro automóvil. Acércate a un experto para que revise este sistema y repare las fallas que sean necesarias.
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